El Club de Montaña Rincón de la Victoria ha denunciado el triste hallazgo de una tortuga boba, especie en peligro de extinción, muerta en una de las playas de la Cala del Moral. El ejemplar tenía una cuerda atada en el cuello y las aletas. Según apuntan, es probable que esta fuese anclada a una roca o a un peso, lo que provocó su ahogamiento.

Un pequeño, vecino de la Cala del Moral, fue quien descubrió el cadáver de la tortuga flotando a la deriva, a escasos metros de la orilla, algo que le llamó la atención. Tal y como apuntan desde el club, se trata de una hembra de unos 30 años aproximadamente y de 85 centímetros de largo, “toda una pérdida irreparable para la fauna marina”.

El presidente del Club de Montaña Rincón de la Victoria, Jose Carlos Cañas, ha señalado que es muy probable que esta tortuga cayera “en una red de pesca, provocando el enojo de los pescadores, quienes, de forma irresponsable y despiadada, decidieron arrojarla al mar, previamente atando su cuello y sus aletas a alguna roca o incluso a un ancla”. “Es un cruel acto que no podemos aceptar o justificar bajo ninguna circunstancia”, ha añadido.

De hecho, el ejemplar incluso perdió su cabeza después de su fallecimiento por la fuerza que provocaba la cuerda que estaba atada al cuello. Desde el club han lamentado los hechos y piden concienciación en la ciudadanía de respetar y conservar el medioambiente gracias a la colaboración de todos.

“No podemos dejar pasar por alto actos tan inhumanos como estos, que atentan no solo contra la vida de una especie en peligro de extinción, sino también contra la armonía de nuestro frágil ecosistema marino. La tortuga boba, clasificada como una especie en peligro por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, UICN , es objeto de medidas de protección en Europa desde hace más de dos décadas. Sin embargo, este incidente nos alerta sobre la fragilidad y la continua amenaza que enfrentan estas maravillosas criaturas en nuestro invadido y contaminado entorno marino”, han zanjado.