Quebrantó una orden de alejamiento por violencia de género y huyó en una moto, a pesar de no tener carné por haber perdido todos los puntos, dando lugar a una persecución de película por el centro de Málaga. Afortunadamente, la Policía Local logró detenerlo como autor de varios delitos. 

Todo ocurrió este jueves, sobre las 17.00 en la calle Cotrina de la capital malagueña. Varios policías locales que se encontraban por la zona detectaron a un individuo que circulaba hacia calle Mármoles sin respetar el ceda el paso que hay entre ambas vías, así que procedieron a darle el alto policial.

Lejos de atender las indicaciones de los agentes, el hombre giró la moto y emprendió la huida a gran velocidad. Los policías locales accionaron los dispositivos luminosos del vehículo patrulla y comenzaron a seguirlo mientras se comunicaban con el resto de patrullas de servicio para avisarles de la dirección de huida.

El hombre, de 43 años, circuló por las calles Montes de Oca y Ríos Rosas, donde dos peatones que cruzaban por el paso de cebras ubicado en la confluencia con Armengual de la Mota se vieron obligados a apartarse para evitar ser atropellados. Otros tantos vehículos que circulaban por esta vía tuvieron que frenar bruscamente para evitar también un accidente.

El individuo circuló por las calles Ríos Rosas y Muñoz Torrero, en esta última, en sentido contrario al estipulado llevando a los coches que circulaban correctamente a subirse sobre la acera para evitar una colisión frontal. Por ella comenzó también a circular el hombre con la motocicleta, lo que obligó a los agentes que les perseguía a frenar ante la presencia de pivotes que impedían el paso de turismos.

En ese momento, dos policías locales que circulaban en motocicleta se incorporaron a la persecución, que continúo hasta calle Calvo, donde el individuo circuló nuevamente en dirección prohibida y dejó la motocicleta abandonada en un estacionamiento y empezó la huida a la carrera.

Los policías locales comenzaron a perseguirlo también a pie hasta que este entró en un salón de juegos del que logró escapar por otra salida en calle Hilera. Tras ello, entró a un reconocido centro comercial, donde intentó esconderse, aunque finalmente los agentes lo encontraron en unos grandes almacenes oculto tras un mueble de ropa. 

Tras su identificación, los policías comprobaron que tenía en vigor un control específico de prohibición de aproximarse a menos de 500 metros a una víctima de violencia de género por malos tratos físicos en el ámbito familiar. Según corroboraron los agentes, quebrantaba esa orden en el punto en el que fue visto en primera instancia.

También constataron que le figuraba una condena de un juzgado de lo penal de Málaga por pérdida de vigencia del permiso de conducir, no habiendo realizado el curso de sensibilización. La motocicleta era de su propiedad, pero no tenía la ITV en vigor ni el seguro obligatorio.

Ante los hechos, los policías locales procedieron a la detención del individuo y a su traslado a dependencias policiales, siendo, posteriormente, puesto a disposición judicial.