Millonario contrato el que acaba de licitar la Universidad de Málaga. La suma del mismo alcanza los 28,8 millones de euros (incluido el IVA). Un dinero que no va destinado a la construcción de una nueva facultad, sino a la limpieza de todos los edificios de sus campus en Teatinos y El Ejido durante los próximos dos años. 

Con este propósito, la institución académica ha publicado este martes el procedimiento de contratación, que fija el 28 de septiembre como la fecha tope en la que las empresas interesadas podrán presentar sus ofertas.

El servicio, que queda dividido en tres lotes, con un total de 50 edificios y unos 590.000 metros cuadrados construidos. El primero de ellos es el correspondiente al campus de El Ejido, donde se localizan nueve inmuebles, a los que sumar el Centro Internacional de Español en El Palo y el edificio del Rectorado, situado en la Avenida Cervantes.

La superficie total de estas edificaciones, según la documentación oficial, supera los 60.000 metros cuadrados. Y el coste estimado inicialmente para la limpieza de los mismos es de 4.936.310,53 euros por dos años.

El segundo de los lotes es el del campus de Teatinos, con 28 inmuebles, a los que se agrega la finca Grace Hutchinson, situada en la barriada de San Julián. Todas estas instalaciones suman casi 340.000 metros cuadrados. En este caso, el valor estimado es de 15.512.033,77 euros. 

Y el tercero de los lotes corresponde con los inmuebles de la zona de ampliación del campus de Teatinos. Hay diez edificios, con unos 190.000 metros cuadrados. En este caso, la cuantía ronda los 8.401.864,51 euros.

En el pliego de condiciones que rige este contrato, se subraya la necesidad de que el personal de la empresa adjudicataria dé un trato respetuoso a los miembros de la comunidad universitaria y usuarios externos, "pudiendo la Universidad de Málaga requerir la sustitución, a cargo de la empresa, de una persona que sea objeto de quejas reiteradas".

Asimismo, se estipula que en caso de huelga, las empresas deberán ofrecer las soluciones que garanticen los servicios mínimos imprescindibles que establezca la UMA, organizando, además, programas de limpieza especiales al finalizar una situación de huelga con el fin de recuperar el estado de limpieza normal en un plazo mínimo. En periodo de huelga, "la retribución de la prestación será directamente proporcional a las horas realmente trabajadas en cuanto a las horas de trabajo programadas en la normalidad".