El joven lotero Joaquín Monroy está contento, pero no eufórico. Tal vez, después de repartir cuatro premios Gordos de Lotería en un año, la emoción no es la misma que con el primero.

La administración de Loterías La Chulapa del Intercambiador de Moncloa vuelve a hacer historia por segundo año consecutivo. "Ninguna administración ha dado siquiera tres Gordos seguidos. Yo di el Gordo de Navidad 2022, uno de la Lotería Nacional del Sábado en febrero; otro de la Lotería Nacional del Jueves en julio y ahora el Gordo de este año.", explica Joaquín Monroy a Madrid Total durante la celebración este 22 de diciembre.

Esta Lotería de Navidad ha vendido décimos del Gordo y de cuatro quintos; el año pasado repartió el Gordo, un segundo y un quinto. Joaquín Monroy y sus diez empleados celebraron con champán este hito en su administración, a la que no acudió ninguno de los afortunados.

Los empleados de la administración de Joaquín Monroy. E. E.

"Ha sido la mejor campaña de nuestra vida. Hemos trabajado para esto. Queremos hacer historia en nuestro país por ser lo mejores", cuenta el lotero con más suerte de todo Madrid.

Por este puesto pasan en torno a 1.100 personas diarias, dato que se dispara en vísperas del sorteo navideño. Todo esto ha hecho que Monroy fuera galardonado este año como el Mejor Lotero de 2023.

Las colas el día antes del sorteo eran más grandes que las de Doña Manolita, según le dijeron los compradores de última hora que hicieron ronda de administraciones madrileñas, pasando primero por Sol y después por Moncloa.

[Joaquín Monroy, el lotero del intercambiador de Moncloa ha vendido el Gordo y cuatro quintos premios]

Para él este gordo ha sido un antes y un después. "Manolita es historia de nuestro país, pero yo he venido a ser el más grande, con compañerismo", declara el lotero de Moncloa.

Este año han repartido cinco premios de 13. "El truco es vender mucho, pero hay más secretos. En el tema del juego es muy importante la matemática, la estadística, las muestras de números...", explica este joven que estudió Administración de Empresas.

A pesar de sostenerse en una base científica, el lotero prefiere repartir la suerte que no llevársela él. Dos de los décimos que jugaba no han sido el Gordo (88008) por un número (el 80008 y el 28008).

Joaquín Monroy muestra sus décimos casi premiados. M. L.

Este puesto de Loterías fue inaugurado el 15 de octubre de 2012 por el padre del actual propietario. Después de que el padre de Joaquín tuviera un enfrentamiento con su socio y acercarse su edad de jubilación, decidió empezar a hacerse cargo del negocio familiar a los 27 años.

Cuando Monroy se hizo cargo del negocio, se empapó todo lo que pudo de la sabiduría de quienes le han precedido y han triunfado en el mundo de las Loterías. "Me he leído los libros del propietario de La Bruja de Oro [famoso establecimiento de Pamplona], que ha fallecido hace poco. Él dice que el crecimiento normal de una administración cuando da un premio es de un 20%. Si yo te enseño mis estadísticas, estoy en un crecimiento del 120%, o sea, es seis veces lo normal".

Joaquín Monroy ya tiene claro que el Gordo de las próximas navidades también lo dará él. "Es nuestra meta: seguir haciendo feliz a la gente".