Hay paella en el menú, para dos personas. Arroz a banda para dos: tiempo de espera 30 minutos. Fideuá de marisco, mínimo dos personas y 40 minutos de espera... son los mensajes habituales que aparecen en la carta de cualquier restaurante que incluye esta comida entre sus opciones.

Sin embargo, los amantes de este plato tan mediterráneo están de enhorabuena porque ya no van a tener que buscarse una pareja gastronómica cada vez que quieran disfrutar de su arroz preferido ya que, aunque salga con rima, ahora Paellitas Tradición tiene la solución.

Este restaurante nació hace dos años en el barrio de Tetuán (calle de Germán) precisamente con la intención de dar a cada cliente su propia paella, su arroz preferido, sin tener que pactar y ceder para ser dos y conseguir el guiso. Eso sí, surgieron con la única condición de que el arroz tenía que seguir la tradición y el gusto valenciano: en paellera y de un dedo como máximo de grosor.

Iván González con una de sus paellitas. E. E.

"El plato más difícil de hacer en casa es la paella. Nosotros estamos dando la oportunidad de comerla en casa, en la oficina o en cualquier otro lugar, igual de rica y con la misma facilidad que hoy en día se piden pizzas, hamburguesas o sushi, pero con la alta calidad de las mejores arrocerías valencianas", explica Iván González, cocinero, valenciano y uno de los socios fundadores de la compañía.

Y es que el éxito de este restaurante, que ya ha abierto su segundo local en la calle de Santa Engracia, no es sólo que puedas comer tu arroz individual en sus mesas, sino que también puedes hacerlo en casa o donde quieras gracias a su delivery.

"Se puede pedir en tiempo récord y se elaboran siguiendo la metodología tradicional, pero con un sistema de gestión y operatividad más moderno y actualizado, que permite tener el plato listo en menos de 20 minutos", aclaran desde Paellitas Tradición.

En la carta podemos encontrar desde el arroz de verduras, uno de carrilleras y ajetes, el mítico arroz a banda, el negro tradicional, la variedad valenciana de arroz al horno y dos fideuás: una de marisco y otra con butifarra. Todas para uno o para más personas.

Paellas individuales. E. E.

Pero no son los únicos caprichos mediterráneos que podemos meter en nuestro delivery y que nos lleguen a casa. También hay entrantes típicos como croquetas hechas con recortes de jamón ibérico, boquerones en vinagre, salmorejo, ensaladilla rusa y la típica salsa alioli. Y de postre: fartons rellenos de horchata. Olor y sabor valenciano.

En las cocinas de ambos restaurantes se apuesta por elaborar los fondos de verduras, carne y mariscos, bases para las paellas, como toda la vida, con cocciones de más de tres horas e ingredientes de la terreta, como el arroz, que viene directamente de la Albufera valenciana, de un proveedor de confianza.

La idea de los restaurantes y de este delivery fue de Iván González y Pablo Pérez-Arauna, los dos jóvenes tras el proyecto que ya piensan en el tercer local esta vez en Ibiza. González es cocinero y valenciano y ya sabe lo que es tratar con mimo el arroz como demostró en su etapa en Barra y Mantel.

Por su parte, Pérez-Arauna es la calculadora del negocio y el impulsor de que ya se esté hablando en la pareja de un plan de expansión mediante franquicias en las principales ciudades de España y Europa, con el apoyo de GNF Worldwide, una firma global referente en el sector.