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El día 22 de diciembre está a la vuelta de la esquina. Y, un año más, millones de españoles seguirán de una manera o de otra el sorteo de la Lotería de Navidad.

Personas que estarán pendientes de que los niños de San Ildefonso acaben cantando ese número comprado con toda la ilusión del mundo y que acabe siendo el Gordo.

Un Gordo de Navidad que 'paga' 400.000 euros al décimo. La mayoría de los ciudadanos suelen comprar un solo décimo de un determinado número (otra cosa es que adquieran otros números diferentes).

Y si no es el Gordo, a nadie le amargan los ‘dulces’ del segundo premio (125.000 euros por cada décimo) o el tercero (50.000 euros por décimo). Tampoco nadie va a poner mala cara si le tocan algunos de los dos cuartos premios (20.000 euros al décimo), o los ocho quintos premios (6.000 euros al décimo).

Quienes no estén aliados con la diosa fortuna, les queda el ‘premio de consolación’ de algunas de las 1.794 pedreas (100 euros al décimo).

Hacienda siempre gana

La alegría de que toque la Lotería de Navidad se ve un poco ‘ensombrecida’ por el hecho de que Hacienda quiere su parte. Y no es pequeña. Porque se queda con el 20% de los premios. ¿De todos? No. La cuantía exenta de impuestos está en 40.000 euros.

Dicho de otra manera, los premios por debajo de esa cantidad no recibirán el ‘mordisco’ de Hacienda. Por tanto, se cobrarán íntegros. Sin embargo, los que superen esa cantidad, si tendrán que tributar.

De esta manera, tanto los cuartos premios, como los quintos, y las pedreas y los reintegros, se cobrarán de manera íntegra por los afortunados.

Sin embargo, no sucederá lo mismo con quienes se vean agraciados con el primer, el segundo y el tercer premio. En concreto, y por cada décimo, Hacienda se queda con 72.000 euros del primer premio, 17.000 euros del segundo, y 2.000 euros del tercero.

Por tanto, quien sea agraciado con el primer premio acabará ingresando en su cuenta bancaria la cantidad de 328.000 euros; si es el segundo premio, 108.000 euros; y si es el tercero, 48.000 euros.

A pesar de lo que se queda Hacienda. el Gordo sigue siendo el más apetecido. Otra cosa es comprar 17 décimos de un número que acabe siendo premiado con un cuarto premio. De hacerlo, esa persona se llevaría 340.000 euros (más de los 328.000 euros del primer premio) y no pagaría un céntimo a Hacienda.