
Apagón total en España
Hace unos días, España vivió un episodio que parecía reservado a la ciencia ficción, un apagón energético total de la red peninsular. Durante varias horas, millones de ciudadanos, empresas y servicios esenciales quedaron sin suministro eléctrico, en una situación sin precedentes para un país desarrollado y altamente digitalizado como el nuestro.
Gracias al trabajo de los operadores de red, la situación se restableció con eficacia y rapidez. Sin embargo, lo ocurrido debe servir como advertencia. Más allá del sobresalto inicial, lo verdaderamente inquietante fue darnos cuenta de hasta qué punto dependemos de la electricidad para todo. Y en ese contexto, la resiliencia se vuelve necesidad.
La respuesta a este tipo de eventos no puede limitarse a una revisión técnica o a la construcción de más infraestructuras. Necesitamos un cambio de paradigma, entender que la red eléctrica no es un ente aislado, sino un sistema complejo donde la tecnología, el entorno y el comportamiento humano están profundamente interrelacionados.
El apagón nos mostró, una vez más, que sin datos, no hay control; y que lo que no se puede medir no se puede mejorar.
El caso de la red eléctrica de la semana pasada ha puesto de relieve la complejidad de un sistema en el que el transporte de energía es clave para entender cómo la tecnología puede ayudarnos a construir ciudades menos dependientes de las infraestructuras. Y para ello, uno de los casos que podemos utilizar es el de los gemelos digitales medioambientales con los que es posible visualizar escenarios para detener a tiempo lo negativo, prepararnos para lo positivo y adelantarnos a posibles eventos que se salgan de los parámetros de la normalidad.
Hemos leído y escuchado mucho acerca del impacto de las renovables en la crisis. Hay algo indudable y es el hecho de que estas fuentes de energía están fuertemente influenciadas por las condiciones climáticas, por lo que comprender estos cambios y adaptarse a ellos es crucial para una gestión eficiente de esta.
Y es aquí donde el papel de los gemelos digitales es fundamental, con soluciones basadas en IoT en combinación con herramientas de modelado medioambiental como grid360, de Libelium, que ayudan a mejorar la eficiencia y rendimiento en el transporte de energía, ofreciendo una visión integral de cómo la tecnología y el análisis de datos meteorológicos pueden revolucionar la gestión energética.
Esta solución analiza parámetros meteorológicos en tiempo real y determina un modelo predictivo de alta precisión que permite a las compañías energéticas, no sólo poder obtener una imagen precisa del rendimiento mejorado que puede tener la red en tiempo real sino también planificarse con varios días de antelación.
Necesitamos un cambio de paradigma, entender que la red eléctrica no es un ente aislado, sino un sistema complejo donde la tecnología, el entorno y el comportamiento humano están profundamente interrelacionados.
El apagón nos mostró, una vez más, que sin datos, no hay control; y que lo que no se puede medir no se puede mejorar.
Esto supone una mejora de la capacidad de transporte de la infraestructura eléctrica de hasta un 30%, que dependiendo del escenario, puede llegar a un 50%. Lo que implica que la infraestructura actual puede transportar más energía procedente de las renovables sin necesidad de contar con ninguna línea adicional - que supondría un coste económico y de tiempo importante - sino usando los datos provenientes de la monitorización meteorológica y adaptando los ciclos de transporte a momentos más idóneos para ello desde el punto de vista ambiental.
El apagón nos mostró, una vez más, que sin datos, no hay control; y que lo que no se puede medir no se puede mejorar. La soberanía energética también es soberanía del dato y sólo si conocemos con detalle qué ocurre en cada tramo de red podremos anticipar, corregir y reaccionar con eficacia. No para evitar lo inevitable, sino para responder con inteligencia, rapidez y confianza y tomar decisiones con evidencias, no basadas en intuiciones o medias, lo que en Libelium denominamos “datocracia”.
*** Alicia Asín es CEO y cofundadora de Libelium