"Sooner or later, you’re going to be the last thing on my mind". Eric Woolfson.

La propuesta del Gobierno español para el sistema de pensiones pone en evidencia un modelo deficitario e insostenible. Un sistema de reparto es insostenible cuando necesita un constante rescate por parte del Estado y todas las "reformas" suponen pagar mucho más y cobrar mucho menos.             

Lo peor es que nos digan que el sistema de pensiones no está quebrado porque el Estado, que es deficitario también, siempre lo va a rescatar. Un plan sin fisuras en un país que se endeuda en más de 50.000 millones anuales de manera estructural, con una deuda sobre PIB del 116% y la mayor tasa de paro de la OCDE y la UE.

Lo peor de la propuesta del ministro Escrivá es que, además de suponer una enorme subida de impuestos sin contrapartida alguna, no soluciona el déficit estructural de la Seguridad Social.

"Lo peor es que nos digan que el sistema de pensiones no está quebrado porque el Estado, que es deficitario también, siempre lo va a rescatar"

Según el Grupo de Investigación en Pensiones y Protección Social de la Universidad de Valencia y de la Universidad de Extremadura, el déficit de la Seguridad Social aumentaría y se situaría en unos 90.000 millones de euros en el periodo final de cálculo.

Todos los supuestos "ahorros" del plan Escrivá aumentando la edad de jubilación y reduciendo la pensión que recibiremos en términos reales no compensan el aumento constante del stock de gasto en pensiones con la inflación, incluso si asumimos un modesto IPC del 2% anual.

No podemos olvidar que el ministro Escrivá afirmaba que no se podían subir las cotizaciones sociales "en ningún caso" ya que son superiores a la media de la Unión Europea. Y lo dijo un mes antes de ocupar su cargo actual.

[Escrivá aprobará la reforma de las pensiones por decreto ley para que entre en vigor el 1 de enero]

De hecho, cada vez que el Gobierno de turno sube las cotizaciones sociales y eleva la edad de jubilación está recortando las pensiones de todos en términos reales y, en la gran mayoría de casos, también nominales.

¿Por qué subir las cotizaciones sociales va en contra del propio sistema que pretenden defender? Porque el problema del sistema de pensiones es triple: demográfico, económico y de empleo. Subir las cotizaciones sociales e impuestos es atacar a la economía y empeorar los tres problemas del sistema de pensiones.

"Subir las cotizaciones sociales e impuestos es atacar a la economía y empeorar los tres problemas del sistema de pensiones"

La pirámide demográfica española está empeorando. Vivimos muchos más años y eso es positivo, pero la unidad familiar se ha reducido masivamente y el crecimiento vegetativo es muy pobre.

Desde 1975, el promedio de edad de la población residente en España ha subido de 33 a 44 años. La población española es una de las que más envejece en media de la OCDE. Pero es importante recalcar que el problema demográfico se genera por la caída de la fecundidad y no porque las personas vivan más años, que es una bendición.

El crecimiento vegetativo de la población, es decir, nacimientos menos muertes por cada 1.000 habitantes, pasó de 10,5 a 0,8 entre 1975 y 2013. El crecimiento vegetativo de la población residente en España presentó en 2021 un saldo negativo de 113.023 personas, al ser los fallecimientos más numerosos que los nacimientos (todos los datos son del INE).

El problema demográfico no se soluciona solo con inmigración, como se demostró en la época de bonanza antes de 2008 en la que recibimos cinco millones de inmigrantes que vinieron a contribuir, trabajar y crear valor y aún así el agujero de las pensiones se ha aumentado por la entrada de muchos más jubilados que cotizaciones.

España tiene un problema económico también. El país lleva estancado desde 2018 y aún no ha recuperado el PIB de 2019. La tasa de dependencia (ratio de empleados por pensionista) es de 2,2 y con la jubilación de la generación que ahora tiene entre 45 y 55 años esa ratio va a empeorar.

"En 2050, solo habrá 1,5 personas en edad de trabajar por cada pensionista, frente a las 3 que hay en la actualidad"

El Banco de España estima que en 2050, solo habrá 1,5 personas en edad de trabajar por cada pensionista, frente a las 3 que hay en la actualidad. Si se mantiene la tasa de desempleo estructural y la debilidad de la economía, es un coctel explosivo, pero si miramos el porcentaje de personas trabajando en el sector privado comparado con el sector público y dependientes es todavía peor.

Hay una segunda derivada del problema económico. España tiene un tejido empresarial creado fundamentalmente por microempresas. Las empresas españolas son mucho más pequeñas que en los países comparables, incluyendo también eso que llaman "grandes empresas".

En España, la inmensa mayoría de las empresas son pymes sin asalariados (55%) y microempresas (38%) y solo el 0,18% son grandes empresas. Además, por categorías también son más pequeñas que la media de nuestras economías comparables.

Hablar de pensiones y de empresas son dos caras de la misma moneda. Un país que asfixia a impuestos a las empresas con una fiscalidad normativa que es muy superior a la media de la UE según el Instituto de Estudios Económicos y que tiene casi tres millones y medio de parados y demandantes de empleo no ocupados, con la tasa de paro más elevada de la OCDE y la Unión Europea, no puede hablar de sostenibilidad del sistema de reparto.

Subiendo las cuotas sociales -impuestos al trabajo- empeora la tendencia y la capacidad de la economía de mejorar en todos esos aspectos antes mencionados.

"El contrato social está roto al penalizar a los ciudadanos que contribuyen hoy para mantener una promesa electoralista"

Es profundamente injusto. El contrato social está roto al penalizar a los ciudadanos que contribuyen hoy para mantener una promesa electoralista. Es intolerable que un trabajador pague mucho más hoy y reciba mucho menos en el futuro, especialmente en términos reales incluso usando estimaciones muy moderadas de inflación.

Es un insulto a todos los contribuyentes llamar "Mecanismo de Equidad Intergeneracional” a un claro incentivo perverso político que dispara los desequilibrios hoy y te hace pagar mucho más durante más tiempo para recibir menos.

Elevar a 35 años el periodo de cálculo de las pensiones supondría un supuesto ahorro de 13.000 millones de euros en 2040, según el Gobierno. Pero solo la subida de pensiones de este año ya va a crear un agujero de 15.000 millones de euros que, además, se consolida y extiende. Hagan el cálculo en valor presente neto descontado con una inflación modesta del 2%. Un agujero imposible de cubrir con la agotada fórmula de subir impuestos constantemente.

La subida de pensiones del 8% hoy es una bajada generalizada a todos, especialmente los que se jubilarán dentro de unos años.

Tenemos que empezar a tener un debate serio porque dar la patada hacia delante solo agranda el agujero y todos sabemos cómo acabó en Grecia, Portugal y otros países.

En Suecia, los salarios medios son un 60%-70% superiores a los de España y tuvieron que modificar su sistema de pensiones a uno mixto (público-privado) ya que el de reparto 100% público no era insostenible. Sistemas mixtos son los de la mayoría de la Unión Europea.

Debemos avanzar hacia un sistema dual, de reparto (publico) y de capitalización (aportación personal que puede ser de gestión pública o privada), donde los jóvenes trabajadores puedan saber a ciencia cierta cuánto están acumulando para su jubilación sin hacer una apuesta suicida a que quede algo en la hucha de las pensiones cuando se retiren.

España tiene 1,36 millones de pensionistas más que en 2010 (en julio de 2021, eran 9,96 millones comparado con 8,6 millones en enero 2010). Adicionalmente, la pensión media se ha revalorizado un 34% entre 2010 y 2021.

El gasto mensual en pensiones es un 43% superior y el anual crece a un ritmo del 4% anual. En 2010 el gasto mensual era de 7.200 millones de euros y en noviembre de 2022 es de 10.913 millones de euros. El gasto en pensiones ya supone más del 11,7% del PIB.

Ninguna medida de subida de impuestos o ingresos habría cubierto un aumento de gasto como ese ni mucho menos eliminar el déficit de la Seguridad Social.

[Opinión: Bruselas, economistas y la CEOE contra la subida de las cotizaciones]

No hay un solo país de la Unión Europea que haya garantizado el poder adquisitivo y las cantidades de las pensiones subiendo impuestos.

¿Cómo se pueden garantizar las pensiones entonces?

Solo atrayendo muchísimo más capital, mayor inversión y empleo. Todas las barreras intervencionistas solo hacen las pensiones más insostenibles y se van pasando la bomba de una Administración a otra esperando que le explote al siguiente.

El déficit de la Seguridad Social solo se puede reducir creando más empleo, dejando que las empresas crezcan y atrayendo más capital e inversión. Atacar a las empresas es atacar a las pensiones de todos.

Todo exceso de hoy es un recorte del futuro.

El Gobierno que ataca a las empresas, ataca a los pensionistas de hoy y del futuro. El Gobierno no te sube las pensiones con el IPC. Te endeuda y nos endeuda a todos a cambio de bajarlas masivamente en el futuro. Eso no es un contrato social, es un engaño.