Opinión VIDEOANÁLISIS

Lo que esconden Díaz y los sindicatos con el SMI

Subir el salario mínimo a 1.000 euros es un guiño del Gobierno a sus votantes. Pero condicionará la negociación colectiva de la que depende el sueldo del grueso de los trabajadores. En 2022 se perderá poder adquisitivo.

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El videoanálisis de María Vega