Un laboratorio biotecnológico. FOTO: Pixabay.
La facturación del diagnóstico in vitro crece un 41% en diez años, pero cada vez tiene menos peso en el gasto sanitario
En el periodo 2019-21 se experimentó un fuerte aumento por la pandemia. En este se registró un crecimiento medio del 30% anual.
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El volumen de negocio del diagnóstico in vitro (DIV) no para de crecer. En los últimos años, la facturación se ha disparado un 41%. No obstante, este sector cada vez tiene menos peso en el gasto sanitario: sólo representaba el 1,2% en 2024 (datos más recientes).
Así lo asegura el último informe del sector diagnóstico in vitro: presente y perspectivas de futuro, presentado por Fenin este martes 25 de noviembre.
Como refleja el estudio, el crecimiento de la actividad de laboratorio es especialmente alto, con una proyección de 64 millones de solicitudes de pruebas de laboratorio y 956 millones de determinaciones a cierre de 2024. De estas, la especialidad de bioquímica clínica, seguida de hematología, son las más solicitadas.
Esto se traduce en unos ingresos de 1.465 millones de euros en 2024, después de un fuerte impulso tras la pandemia.
En el periodo 2019-21 se experimentó un fuerte aumento debido a la incidencia del COVID-19. En este se consiguió un crecimiento medio de cerca del 30% anual y el sector alcanzó un volumen económico de 1.817 millones de euros.
Se espera que la facturación del sector alcance los 1.541 millones en 2028, con un crecimiento anual del 1,3% en los próximos años. Esto se explica por el auge de las pruebas en pacientes crónicos y el mantenimiento de las pruebas diagnósticas de enfermedades infecciosas, según refleja el informe.
Sin embargo, el porcentaje de gasto sanitario que se dedica al sector está disminuyendo, a excepción de los años de mayor incidencia del Covid, ahora representa un valor inferior al de la media europea (1,6%). Lo mismo ocurre con el gasto sanitario per cápita. España dedica 30 euros por habitante frente a los 31,4 de la UE.
"Esta situación arroja una paradoja: mientras que el peso del sector aumenta su actividad y se reconoce su importancia en la toma de decisiones clínicas, su peso relativo no ha crecido al mismo ritmo sobre el gasto sanitario", detalla el informe.
De esta manera, como ha reflexionado Fernando Bandrés, presidente de Fenin, este escenario trae consigo una reflexión sobre la importancia de apostar por la inversión, la evolución y la innovación en el sector DIV.
Evolución
De esta manera, los avances de la industria del DIV ponen el foco en la medicina personalizada, los nuevos modelos asistenciales (atención sanitaria en el domicilio del paciente), en el diagnóstico molecular y la aplicación de la inteligencia artificial y el Big Data, entre otras.
Así, Bandrés ha hecho hincapié en la necesidad de fomentar las prácticas clínicas compartidas, la importancia de la revisión clínica periódicamente y en impulsar la precisión de la entrevista clínica. "Para ello, hay que invertir tiempo que ayude a mejorar nuestro diagnóstico."
No obstante, todo este contexto debe tenerse en cuenta en una situación actual en la que el sector se enfrenta a un entorno regulatorio muy exigente, según ha declarado Carlos Cisternas, coordinador del sector de diagnóstico in vitro de Fenin.
La entrada en vigor de recientes normativas de afectación a este sector (como el Reglamento europeo 2017/746 IVDR de productos in vitro) garantizan mejores prestaciones y seguridad en el empleo de estas tecnologías. Pero, la compleja aplicación de los nuevos estándares y requisitos puede repercutir en la óptima disponibilidad de estos productos en el mercado y su acceso por profesionales y pacientes.