El número de ciberataques que sufre el sector sanitario a nivel internacional no ha dejado de incrementarse desde que comenzó la pandemia de la Covid-19. Los últimos datos cifran en más de 300 los incidentes de seguridad en la sanidad. 

Así se desprende del informe elaborado por la compañía S21sec, que recoge los ataques cibernéticos sufridos por este sector durante el segundo semestre de 2021. 

Según explica la compañía de ciberseguridad en el estudio, "se han observado altos picos en los meses de julio, septiembre, octubre y principios de diciembre". 

"A la hora de analizar todos los ataques sufridos por el sector de la salud durante los últimos meses se identifica un aumento notable de incidencias, pudiendo distinguir entre ataques informáticos de diversa tipología como troyanos, brechas de seguridad, infostealers, spyware y ransomware", ha explicado Sonia Fernández, responsable del equipo de Inteligencia de S21sec.

Entre los ataques identificados, el sector de la sanidad habría sufrido más de 60 ataques de ransomware dirigidos contra hospitales, clínicas privadas, centros de salud y laboratorios.

El informe avisa, además, que estos incidentes suelen tener consecuencias a largo plazo. Un ejemplo es el Servicio Ejecutivo de Salud de Irlanda, que sufrió un ciberataque en mayo 2021 del que todavía no se han recuperado. Y es que, los hospitales irlandeses no han vuelto a funcionar con total normalidad. 

En definitiva, la empresa que ha elaborado el estudio concluye que se mantiene la tendencia al alza de los últimos dos años de ataques a centros de salud y hospitales. Además, "los actores maliciosos siguen aprovechando la situación sociosanitaria y las diferentes variantes de la Covid-19 para engañar a las víctimas", avisan.

En línea con 2020

Si bien en el primer semestre de 2021 los ciberataques se centraron en el ámbito educativo, el sanitario fue protagonista en los últimos seis meses de 2020.

Uno de los incidentes más relevantes -que recoge el informe de S21sec correspondiente a ese periodo- fue el ataque que sufrió la aseguradora Mapfre. Este supuso que algunos de los servicios de la compañía no pudieran darse correctamente durante varias horas.

También la compañía de salud Adeslas sufrió un ataque informático de tipología ransomware que afectó al desarrollo de sus actividades diarias, así como a su sistema de gestión de citas por Internet.

Unos hechos que han continuado también en 2021. De hecho, la compañía ya avisó en su informe de 2020 que era altamente probable que los actores responsables de los mismos mantuvieran su línea de acción.