Un cable de fibra óptica encima de una placa electrónica.

Un cable de fibra óptica encima de una placa electrónica. Telefónica / Europa Press

Observatorio digital

Los reguladores europeos contradicen a las operadoras y no ven justificado que las 'Big Tech' financien las redes

El Berec afirma que los costes de actualizar las redes para gestionar el aumento del tráfico es "muy bajo" en comparación con los costes totales. 

14 octubre, 2022 03:51

Jarro de agua fría para los operadores de telecomunicaciones. Su campaña para lograr que las grandes tecnológicas financien el despliegue y el mantenimiento de las redes se acaba de encontrar con el rechazo de los reguladores europeos, que consideran que no existe ningún argumento que justifique en estos momentos su petición.

El Organismo de Reguladores Europeos de Comunicaciones Electrónicas (Berec, por sus siglas en inglés), del que forma parte la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), acaba de publicar un informe con su evaluación preliminar sobre la posibilidad de establecer una "compensación directa" de las Big Tech a los operadores por el uso que hacen de las redes. 

Y esta valoración no puede ser menos favorable a los intereses de las grandes compañías de telecomunicaciones, ya que el Berec señala que no ha encontrado "ninguna evidencia" que justifique esta petición realizada por ETNO, la patronal de las operadoras de telecomunicaciones europeas.

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Pero es que, además, los reguladores también advierten de que la propuesta realizada por la asociación presentaría varios riesgos para el ecosistema de Internet, ya que podría provocar que los operadores gestionaran las redes como prácticamente un monopolio como ocurrió en el pasado con las redes de telefonía analógica. 

Además, recuerda que no se trata de un debate nuevo en el sector, ya que las 'telecos' ya plantearon esta posibilidad en 2012 y 2017. El Berec recuerda que, en ambas ocasiones, los reguladores ya rechazaron que las Big Tech financiaran las redes con unos argumentos que considera siguen siendo válidos en el análisis actual del mercado.

Costes "muy bajos"

El primer argumento esgrimido por Berec tiene que ver con el coste que le supone a los operadores el aumento del tráfico generado por los servicios que prestan los gigantes digitales. ETNO calcula que alcanza entre 36.000 y 40.000 millones de euros al año, pero el regulador critica que esta visión da por supuesto que el incremento del tráfico se traduce directamente en unos mayores costes, cuando no es necesariamente así. 

En este sentido, subraya que los costes de las mejoras que es necesario realizar en las redes para gestionar un mayor volumen de tráfico IP son "muy bajos" en comparación con los costes totales que requieren el despliegue y el mantenimiento de las redes de telecomunicaciones.

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En concreto, detalla que los costes de mantenimiento de las redes de telefonía fija presentan una sensibilidad "muy baja" a la evolución del tráfico de datos. En el caso de las redes móviles, el regulador sí admite que estas experimentan "cierto grado de sensibilidad" a las variaciones en el volumen de tráfico IP. 

Berec remarca que el aumento del tráfico sí puede generar algunos problemas de capacidad que requieran actualizaciones tecnológicas de las redes. Sin embargo, incide en que estos costes hay que diferenciarlos de los costes totales, que están generalmente asociados a cuestiones de cobertura, como nuevos despliegues en zonas sin conexión, u otros inherentes al propio modelo de negocio de las operadoras. 

Capacidad de adaptación

Por otro lado, el Berec destaca que Internet ha demostrado siempre su capacidad de autoadaptación a las condiciones cambiantes de mercado, como han sido el aumento del volumen de tráfico o los cambios en los patrones de demanda de los consumidores, en los modelos comerciales o en el del desarrollo de la tecnología.

"La capacidad de autoadaptación de Internet ha sido y sigue siendo esencial para su éxito y su capacidad innovadora", subraya el organismo, quien recalca además que todos los cambios que se han producido en los últimos años han tenido lugar sin la necesidad de que intervengan los reguladores. 

Por todo ello, considera que tiene que haber una "justificación adecuada" para llevar a cabo cualquier medida que suponga una intervención en el mercado, dado el impacto que ello conllevaría. Esta intervención sólo tendría sentido si el mercado no funcionara correctamente o hubiera un significativo número de disputas entre diferentes actores. Y ese no es el caso actualmente. 

Por otro lado, también advierte de que obligar a las grandes tecnológicas a financiar las redes daría a las operadoras la capacidad de explotar su negocio como un monopolio. Esto supondría un cambio "tan grande" en el mercado que puede supone un "perjuicio importante para el ecosistema de Internet". Por ello, sería obligatorio una supervisión e, incluso, una intervención de los reguladores.

Smartphone con las aplicaciones de Twitter, Facebook, WhatsApp, Instagram o TikTok, entre otras, en la pantalla junto a una taza de café.

Smartphone con las aplicaciones de Twitter, Facebook, WhatsApp, Instagram o TikTok, entre otras, en la pantalla junto a una taza de café. Unsplash / Europa Press

Otro punto en el que hace hincapié el informe es que el tráfico de datos es solicitado y, por tanto, causado por los clientes de las operadoras de telecomunicaciones. Y además, recuerda que los costes de la conexión a Internet suelen ser cubiertos y pagados por estos mismos clientes.

Además, agrega que las grandes tecnológicas y los operadores de telecomunicaciones son "mutuamente dependientes". Y es que la demanda de contenidos por parte de los usuarios impulsa la demanda de acceso a la banda ancha, pero al mismo tiempo la disponibilidad de acceso de banda ancha también impulsa la demanda de contenidos.

Respuesta de ETNO

La publicación del informe del Berec no ha tardado en recibir respuesta de ETNO. La patronal de las 'telecos' asegura que toma nota de la evaluación preliminar que hace el regulador del asunto, pero apunta que no aporta ningún dato nuevo al debate. 

En este sentido, remarca que tanto ETNO como sus miembros están trabajando para proporcionar "pruebas adicionales basadas en hechos" en la próxima consulta pública que llevará a cabo en 2023 la Comisión Europea sobre la regulación del sector de las telecomunicaciones en general y la financiación de las redes en particular. 

[Bruselas lanzará en 2023 una consulta sobre si los gigantes digitales deben financiar las redes de telecomunicaciones]

Además, agrega que el debate ya ha trascendido "más allá de las propuestas del sector en Europa", dado que los reguladores estadounidenses y asiáticos ya están estudiando la contribución de los gigantes tecnológicos a la financiación de los costes de la red.

Además, incide en que dicho debate no sólo aborda el mercado de interconexión de Internet, sino que también abarca actualmente otros desarrollos como el metaverso y la sostenibilidad general del ecosistema, como ha declarado recientemente Thierry Breton, comisario europeo de Mercado Interior.

"La evaluación preliminar del Berec no aporta nuevos datos: confirmamos nuestra voluntad de seguir contribuyendo a un análisis adicional con visión de futuro por parte de los responsables políticos y los reguladores de la UE", concluye la asociación.