Cardumen ha registrado el vehículo Impulso Global Fund of Funds FCR. Dirigido tanto a inversores institucionales como privados, la colaboración entre ambas firmas intentará aprovecharse de la gran experiencia de Cardumen en los activos alternativos y del conocimiento de Portocolom sobre las inversiones de impacto social y medioambiental.

El vehículo tendrá una duración total de diez años desde la fecha del primer cierre, que se producirá cuando se alcancen compromisos de inversión por 20 millones, aproximadamente. Al cumplir el décimo año, la gestora podrá ampliar la duración del fondo por tres periodos consecutivos de un año cada uno, según se describe en el folleto.

De cara al cierre definitivo, el fondo contempla la posibilidad de que haya sobresuscripción, de tal forma que el patrimonio comprometido objetivo podría llegar hasta los 150 millones de euros.

Impulso Global Fund of Funds tiene la intención de invertir al menos el 80% del capital en operaciones primarias y de secundario en fondos subyacentes. Ha establecido ocho temáticas específicas donde poner el dinero de los clientes: agricultura y alimentación; agua y sanidad; economía circular; educación y empleo; energía sostenible; inclusión financiera; infraestructura e inmobiliario, y salud y Estado del bienestar.

[La CNMV considera importante etiquetar, aunque sea de forma mínima, la sostenibilidad de los fondos]

Su ámbito de actuación está abierto a Europa -incluidos Reino Unido e Israel-, Estados Unidos y países emergentes de Latinoamérica, el sudeste asiático y África. Como desgrana el folleto, el fondo invertirá en torno a 15 fondos, pudiendo adquirir participaciones en fondos de diferente tipo (capital riesgo, deuda privada y activos reales), y en diferentes etapas de desarrollo (early stage, growth y mature).

En su ambición por ser sostenible y generar impacto, el vehículo de Cardumen -que actúa como gestora- y Portocolom -que lo asesora- perseguirá contribuir a los ejes relacionados con las personas, el planeta y la prosperidad de las sociedades en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas.

Dos culturas complementarias

Presidida por Gil Gidron y fundada por Gonzalo Martínez de Azagra e Igor de la Sota, Cardumen Capital cuenta con 200 millones de euros bajo gestión. Fue fundada en 2018 y tiene oficinas en Madrid y Tel Aviv, puesto que su origen está ligado a la inversión en compañías tecnológicas con ADN israelí.

Por su parte, Portocolom nació en 2008 con la idea de dar un asesoramiento patrimonial responsable, añadiendo los criterios sostenibles (ASG) y de impacto a las métricas financieras tradicionales. Liderada por Iker Barrón y Ana Guzmán, busca obtener una “rentabilidad financiera integrada en la dignidad humana y el crecimiento económico inclusivo y sostenible”.