González Herrero está en el país centroamericano junto a su actual esposa, la colombiana Kelly Johana Galeano. Así lo ha podido confirmar EL ESPAÑOL-Invertia con fuentes relacionadas.

El conglomerado inversor con sede en la capital del Bierzo está siendo investigado por la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional, por la Audiencia Nacional, así como por la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones (DGSFP), dependiente del Ministerio de Economía.

De hecho, el supervisor de los seguros recordó hace unos meses que hasta seis entidades filiales del conglomerado Herrero Brigantina son sujetos no autorizados para la actividad aseguradora y de distribución: Broker Asegurador de Ultramar, Compañía Galega de Corretaxe, Compañía Leonesa de Mediación Aseguradora, La Marina AB Mediadores, North Atlantic Insurance Broker Company y Astudeme.

Es más, la DGSFP suspendió hace casi dos meses la licencia de la filial de seguros de Herrero Brigantina, como informó El País. Esto es, le ‘cortó’ el código con el que operaba hasta ese momento.

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El grupo recaudó presuntamente 40 millones de euros entre 2021 y 2022 con soluciones que prometían una rentabilidad de hasta el 50% en diez años. Además, utilizaba unos seguros unit linked con cestas de fondos de inversión que, supuestamente, eran respaldados por aseguradoras como AXA, Plus Ultra o Generali. Aunque éstas se han desvinculado de Herrero Brigantina e, incluso, alguna de ellas como Generali, emitió un comunicado para dejar constancia. Muchos clientes no han podido recuperar su dinero.

Todo apunta a que González Herrero se encuentra en Colombia porque, tal y como constatan las fuentes consultadas por este periódico, el roaming de su teléfono móvil se conecta desde el país latinoamericano desde el pasado mes de agosto.

Red societaria en Miami

No obstante, como las autoridades no han retirado el pasaporte al ideólogo de Herrero Brigantina, “alguna vez ha seguido viniendo a Ponferrada”, aclara una de las fuentes. Según esta misma fuente, Juan González Herrero y Kelly Galeano realizaron en julio una separación de bienes por la que “ella se queda con todos los bienes de Ponferrada y Asturias”, donde se concentra el patrimonio personal del empresario. O, lo que es lo mismo, con todos los bienes en España para así eludir a la justicia.

Aunque González Herrero esté en Colombia, el dinero se habría desviado a Miami (Estados Unidos), donde el español estableció una red de sociedades mercantiles y patrimoniales a las que, poco a poco, se habría ido trasvasando las cantidades estafadas a los clientes en España. Varias fuentes conocedoras estiman que la cifra total movilizada a EEUU podría superar los 27 millones de euros, tras descontar las compras de propiedades que el fundador de Herrero Brigantina ya ha acometido. Se habla incluso de un cafetal en Colombia.

Sede del Grupo Herrero Brigantina en Ponferrada.

“Juan tomaba todas las decisiones de Herrero Brigantina personalmente y con un estilo faraónico. Sin embargo”, matiza la fuente anterior, “no aparecía como administrador en ninguna filial ni sociedad relacionada”.

Dos de las fuentes consultadas coinciden al señalar que González Herrero -presidente del consejo asesor- se ha llevado a Colombia más de una veintena de automóviles de alta gama que estaban en renting a nombre de la empresa. Entre ellos, marcas como “BMW, Audi y algún que otro Mercedes”. Los coches habrían partido en varios contenedores de la empresa Maersk desde el Puerto de Algeciras.

El clan colombiano

Todos estos automóviles eran conducidos en España por dos decenas de ejecutivos colombianos -algunos de ellos familiares de Kelly Galeano- que el ideólogo de Herrero Brigantina puso ‘a dedo’ tras repescar como directora general y vicepresidenta del consejo asesor del grupo inversor a su actual esposa desde su trabajo anterior de camarera en un hotel de la ciudad leonesa.

Las concesionarias intentan reclamarlos, pero -como González Herrero no es administrador de ninguna filial ni sociedad de Herrero Brigantina, sino que lo son trabajadores rasos del grupo puestos a modo de ‘pantalla’- la persecución está siendo muy complicada.

Hasta la fecha, más de 1.000 inversores reclaman su dinero a Herrero Brigantina, de los cuales unos cientos se han aglutinado en una plataforma de afectados. La macrocausa está siendo investigada por el magistrado de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz. 

Varios despachos de abogados han interpuesto querellas por supuestos delitos como falsedad documental, estafa agravada y piramidal, apropiación indebida u organización criminal. El dinero bloqueado alcanza en algunos casos los 300.000 euros por cliente.