Al César lo que es del César. El grueso de los beneficios fiscales diseñados para este año se los ‘engulle’ el IRPF, con 9.130 millones presupuestados, un 15% superior al importe destinado un año antes. Pero si se descuentan las medidas que ya estaban en los Presupuestos de Rajoy, la partida de beneficios fiscales de este año para el IRPF solo crecería un 3,7%.

El presupuesto de beneficios fiscales es la disminución de los ingresos tributarios que se producirá previsiblemente a lo largo del año, como consecuencia de la existencia de incentivos fiscales. Todas las exenciones, reducciones en rentas y en bases imponibles, tipos impositivos reducidos, bonificaciones, deducciones en las cuotas y devoluciones de los impuestos formarían parte de este capítulo.

El gobierno de Pedro Sánchez ha destinado a esta partida 37.237 millones, un 6% más que la cifra actualizada de 2018, y un incremento en términos absolutos de 2.116 millones de euros. De estos incentivos se benefician los contribuyentes de IRPF, Sociedades, IVA, Patrimonio, renta de los no residentes, tasas…

Pero el grueso de los mismos corresponde al IRPF, que se ‘come un cuarto’ del total de los incentivos. Las ayudas al IRPF suman los 9.129 millones, un 15,3% respecto a la última cifra de 2018 y un 16,4% respecto a la cifra presupuestada para ese año. Este comportamiento “expansivo”, según detalla la memoria de beneficios fiscales que acompaña a los presupuestos de 2019, se debe a los fuertes incrementos derivados, por un lado, de la reducción aplicable a los rendimientos del trabajo y, por otro, de las deducciones por familia numerosa o personas con discapacidad a cargo y por maternidad, como consecuencia de las modificaciones aprobadas por los presupuestos de 2018. Sin el efecto de estos tres factores, el beneficio fiscal asociado al IRPF en comparación con el que se incluyó en 2018 sería del 3,7%.

Pero, como se ha dicho, hay algunas medidas que recoge la anterior ley de presupuestos, la de 2018, que tienen su primer reflejo este año, y se evalúan por primera vez en este capítulo de beneficios fiscales.

Maternidad

Con efectos desde el 1 de enero de 2018, la ley de presupuestos de 2018 introdujo una modificación en el precepto que regula la deducción por maternidad, consistente en el incremento del importe de dicha deducción hasta en 1.000 euros adicionales cuando el contribuyente que tenga derecho a la misma hubiera satisfecho en el período impositivo gastos de custodia del hijo menor de tres años en guarderías o centros de educación infantil autorizados, sin que este incremento adicional pueda ser solicitado de forma anticipada como ocurre con el resto de la deducción.

Esta medida tiene efectos en el PBF 2019, donde se recogen las estimaciones referentes a las declaraciones anuales del impuesto del ejercicio 2018 y a las solicitudes que presenten en el año 2019 los contribuyentes que no tienen obligación de declarar para que se les pague la cuantía que les corresponda.

Rendimientos del trabajo

La reducción por obtención de rendimientos del trabajo tiene la consideración de beneficio fiscal. El Gobierno del PP estableció en los Presupuestos de 2018 una modificación, con el objeto de incrementar la reducción del rendimiento neto del trabajo para los contribuyentes con menores rentas. Anteriormente, dicha reducción se aplicaba a los contribuyentes con rendimientos netos del trabajo inferiores a 14.450 euros. A partir de julio se amplió hasta los 16.825 euros. Su cuantificación global no se ha recogido hasta este año.

Familias numerosas o personas con discapacidad a cargo

Los presupuestos de 2018 introdujeron varias modificaciones en la deducción por familia numerosa o personas con discapacidad a cargo, con efectos desde julio de este año. Por un lado, se incorporó al cónyuge no separado legamente cuando fuese una persona con discapacidad y dependiese económicamente del contribuyente y, por otra parte, se amplió la cuantía de los límites establecidos para las deducciones por familia numerosa, hasta en 600 euros anuales.

LOS PRINCIPALES BENEFICIADOS

Los seis conceptos de mayor importancia numérica en el IRPF son: las deducciones por familia numerosa o personas con discapacidad a cargo (1.382 millones), la reducción por rendimientos del trabajo (1.288 millones), la reducción en la base imponible por tributación conjunta (1.070 millones), la deducción por maternidad (1.029 millones), la deducción en la cuota íntegra por inversión en la vivienda habitual (en régimen transitorio) y la reducción en la base imponible por aportaciones a sistemas de previsión social, con importes de  974,43, y 814,32 millones de euros, respectivamente. Estos conceptos absorben en su conjunto cerca de las tres cuartas partes del importe total de beneficios fiscales en este impuesto, en concreto, el 71,9%.