Este proyecto nace bajo la marca Waggle, amparado por la firma española especializada en intraemprendimiento y en innovación de modelos de negocio. Este nuevo servicio permite a los dueños de este tipo de mascotas aunar los cuidados en torno a su alimentación, salud e incluso ocio bajo una suscripción mensual con cuota fija que, además, ayuda a controlar los gastos.

¿No entendíamos cómo, si un perro o un gato come todos los meses exactamente el mismo producto y la misma cantidad, no había un servicio de suscripción que se encargara de gestionarlo y de enviarlo a casa¿, afirma Ignacio Ramírez, fundador de Waggle. La cuota fija se calcula en función de las características del perro o gato (peso, edad, actividad diaria, etc.) y a ella se pueden añadir servicios extras como alojamiento, adiestramiento o peluquería.

De este modo, Waggle es capaz de cubrir todas las necesidades de la mascota. Por el momento, Waggle funciona en Barcelona y Madrid, pero está ya en fase de ampliación para llegar a los núcleos urbanos más importantes del país. El objetivo de esta startup es llegar a los 15.000 clientes en su primer año de funcionamiento.

El sistema se fundamenta en un pequeño cuestionario sobre las características de la mascota para calcular la cuota básica del servicio, que incluye asesoramiento nutricional, envío a domicilio de la comida y un par de consultas veterinarias para una revisión general, bien en una clínica o en la propia casa del interesado. El número de estas depende de la edad del animal para el que se contrata esta suerte de iguala veterinaria.