Uso de la IA
La inteligencia artificial, sobre todo sus “embajadores” como Nvidia y OpenAI, no dejan de impulsar la bolsa. Así, con acuerdos con compañías como Palantir, Uber, Microsoft o PayPal, los índices Dow, S&P 500 y Nasdaq marcaron nuevos récords el martes. Pero, ¿y los que usan la IA directamente? ¿Realmente ayuda?
A nivel corporativo, aunque la IA puede aumentar la productividad de los empleados, especialmente si la usan profesionales, eso no siempre se refleja de inmediato en los resultados financieros. De hecho, según el MIT, el 95% de los proyectos de IA hasta ahora no han mostrado un impacto claro.
Para que la tecnología realmente le sirva tanto a las empresas como a sus clientes, tiene que enfocarse en mejorar tareas y procesos rutinarios, como los de contabilidad.
Hasta ahora, justamente la automatización de estas labores de back office es lo que ha generado el mayor retorno sobre la inversión (ROI).
En el uso personal, según MEXC, el 67% de los traders de la Generación Z que operan con activos digitales como Bitcoin usaron al menos un bot de trading con IA en el segundo trimestre de 2025. Es difícil evaluar su eficacia, porque cada bot tiene estrategias diferentes y los resultados varían mucho.
En cuanto a la eficiencia de IA como ChatGPT, Gemini, Grok y Deepseek, Nof1 organizó una especie de “competencia de trading en vivo” para ver cuál podía generar beneficios en un escenario real de mercado. A cada modelo le dieron 10. 000 dólares para operar con criptomonedas como Bitcoin o Solana.
Hasta ahora, solo dos bots han logrado beneficios sostenidos. En cuanto a las perspectivas, dado que estas IA se entrenan con grandes volúmenes de texto generado por humanos y que en algunos periodos hasta el 95% de los traders pierden dinero, no se puede descartar que la situación empeore a largo plazo.
En resumen, tanto en la integración de la IA en los procesos empresariales como en su uso personal —incluidas las inversiones—, no conviene depender ciegamente de la tecnología.
Como en todo, hay que usar la inteligencia artificial como apoyo, pero sin reemplazar por completo el juicio humano.
***Igor Kuchma es analista de Trading View.