Un operador trabaja en el parqué de la Bolsa de Nueva York.

Un operador trabaja en el parqué de la Bolsa de Nueva York. Reuters

Mercados

Wall Street, dividido entre las caídas y las subidas tras los últimos aranceles de Trump

Goldman Sachs ha mejorado sus previsiones para el S&P 500 a tres, seis y doce meses vista.

Más información: Estados Unidos vuelve a retrasar la fecha límite para llegar a acuerdos arancelarios del 9 de julio al 1 de agosto

L. Piedehierro
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Wall Street iniciaba la sesión del martes con tendencia mixta, intentando reponerse de los descensos registrados en la víspera. La atención de los inversores sigue centrada en la política comercial del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Tras el toque de campana, el Dow Jones perdía un 0,14%, hasta los 44.341,09 puntos. Al mismo tiempo, el S&P 500 avanzaba un 0,03%, hasta los 6.231,59 puntos, y el Nasdaq Composite, un 0,15%, hasta los 20.443,16 puntos.

Las mayores subidas del Dow Jones eran las de Chevron (+0,7%), UnitedHealth (+0,55%) y Nvidia (+0,51%). Por el contrario, las mayores caídas eran las de Nike (-2,14%), JPMorgan (-1,79%) y P&G (-0,89%).

Así abre Wall Street Eduardo Bolinches

El parqué neoyorquino intentaba volver a subir tras haber cerrado la jornada del martes con caídas cercanas al 1%. La Bolsa de Nueva York reaccionó así al último episodio de vaivenes arancelarios de la Administración Trump.

Por un lado, Trump pospuso del 9 de julio al 1 de agosto la tregua arancelaria concedida a sus socios comerciales.

En declaraciones a la prensa en la Casa Blanca, sin embargo, Trump se mostró abierto a aplazar de nuevo la entrada en vigor de los aranceles, que anunció por primera vez en abril, si los países dan señales de querer negociar.

Por lo pronto, la extensión del plazo se materializó en una orden ejecutiva que, según la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, servirá para que Washington tenga tiempo de negociar buenos pactos con cada país.

Pero el anuncio llegó el mismo día en que Washington empezó a enviar ya misivas a algunos de sus socios con los nuevos aranceles que contempla aplicarles a partir de agosto a menos que estos eliminen sus gravámenes y barreras comerciales.

Los dos primeros fueron Japón y Corea del Sur. Las importaciones de bienes desde estos países pasarán a pagar un 25% en Estados Unidos, un porcentaje que no cambia en el caso surcoreano respecto a lo anunciado a principios de abril y que en el japonés sube un punto.

Las importaciones de otra docena de países también sufrirán nuevos gravámenes unilaterales debido a la falta de avance en las negociaciones.

En la lista se encuentran Birmania y Laos, con tasas del 40%; Camboya y Tailandia, del 36%; Serbia y Bangladesh, del 35%; Indonesia, del 32%; Sudáfrica y Bosnia y Herzegovina, del 30%, y Túnez, Kazajistán y Malasia, del 25%.

En las cartas enviadas a estos países se les advierte de que si quieren abrir su mercado a Estados Unidos y eliminar sus aranceles y barreras arancelarias, Washington considerará "tal vez" un ajuste a dichas cifras.

Los analistas de Bradesco BBI creen que "el mercado se siente reconfortado por el hecho de que el problema se ha postergado aún más y la expectativa sigue siendo que el ladrido es mucho peor que la mordida", según recoge Reuters.

La reacción de Wall Street, así como el del resto de principales bolsas del mundo, contrasta drásticamente con la fuerte ola de ventas que siguió a los anuncios de aranceles del Día de la Liberación.

El Nasdaq Composite llegó a caer más de un 20% desde sus máximos más recientes, lo que se conoce como caer en territorio bajista; mientras que el Dow Jones y el S&P 500 sufrieron correcciones de más del 10%.

Desde entonces, Wall Street se ha recuperado –igual que el resto de mercados de renta variable– y tanto el Nasdaq como el S&P 500 han alcanzado nuevos máximos históricos. "No hemos visto ninguna consecuencia económica dramática por el gran aumento de los aranceles", añaden los expertos de Bradesco BBI.

Hasta la fecha, Estados Unidos sólo ha alcanzado acuerdos comerciales con Reino Unido y Vietnam. En junio, Washington y Pekín llegaron a un principio de acuerdo.

La Fed y el S&P 500

Con el S&P 500 cerca de sus máximos históricos, los analistas de Goldman Sachs han elevado sus previsiones de rentabilidad a tres, seis y doce meses para el índice.

Para llevar a cabo esta revisión, el banco de inversión cita las expectativas de recortes de tipos en Estados Unidos y la continua fortaleza bursátil de las grandes cotizadas estadounidenses.

Con esta premisa, en Goldman Sachs ven al S&P 500 en los 6.400 puntos en tres meses, en 6.600 puntos en seis y en 6.900 puntos a doce meses.

Sin embargo, el mercado ha descartado que la Reserva Federal (Fed) reduzca las tasas de referencia en julio. Da un 60% de posibilidades a que el descenso tenga lugar en septiembre.

El miércoles se publicarán las actas de la reunión que en julio mantuvo la Fed. Los documentos podrían ofrecer a los inversores más claridad sobre el momento en el que la institución presidida por Jerome Powell retomará las bajadas.