Fachada en la sede de Indra en Madrid.

Fachada en la sede de Indra en Madrid. Jesús Hellín Europa Press

Mercados La lupa de Bolinches

Indra busca reaccionar desde el soporte de los 16 euros tras la fuerte sobreventa acumulada

Un cierre diario por encima de los máximos del viernes podría atraer capital desde valores con signos de agotamiento o sobrecomprados.

Más información: El Ibex 35 empieza a dar síntomas de agotamiento en el arranque de semana

Eduardo Bolinches
Publicada

El Ibex 35, que cerró el viernes con una caída del 0,33%, tuvo un mejor comportamiento que sus homólogos europeos gracias a los positivos resultados de la banca, finalizando en 12.688 puntos. Habrá que observar qué sucede en la zona de los 12.700 enteros, ya que el índice acumula seis semanas consecutivas de subidas que podrían generar síntomas de agotamiento. En este contexto, hoy lunes destaca el comportamiento de las acciones de Indra, por la zona en la que están iniciando un rebote técnico.

Menos de tres semanas después del nombramiento de Ángel Escribano como presidente de Indra en sustitución de Marc Murtra, la compañía tecnológica española, en la que la sociedad estatal Sepi posee un 28%, ha renovado su comité de dirección. Así, la empresa ha designado a Víctor Pérez como nuevo director de la división de tráfico aéreo y a Laura Templado como directora de Auditoría Interna y Riesgos Globales.

El objetivo de Indra es ganar protagonismo en la industria militar europea, aunque su capacidad para competir con los grandes actores de Reino Unido, Francia, Alemania e Italia sigue siendo limitada, al menos por ahora. La reciente compra de Hispasat por 725 millones de euros a Redeia añade un activo estratégico a la compañía, consolidando su presencia en el sector de defensa. Sin embargo, a pesar de la relevancia de esta operación, sus rivales europeos aún la superan en múltiples aspectos.

Desde un punto de vista técnico, es clave analizar la evolución del valor desde mediados del año pasado hasta la actualidad. El 6 de junio, Indra marcó un máximo anual en formato intradiario de 21,75 euros. A partir de ese nivel, sus acciones iniciaron una fase de caídas con una pendiente acusada, dejando dibujada una pauta de mínimos y también de máximos decrecientes mostrando claros signos de debilidad.

En su descenso, los títulos de Indra perdieron soportes clave y se situaron por debajo de sus tres medias móviles más representativas —de corto, medio y largo plazo— hasta encontrar un suelo de mercado en la zona de los 16 euros por acción.

Evolución de las acciones de Indra

Evolución de las acciones de Indra Eduardo Bolinches Tradingview

Desde este punto, donde Indra comenzó a frenar la caída, se inició una fase de consolidación de niveles y formación de un suelo de mercado que se prolongó durante varios meses. Sin embargo, lo más relevante para el valor ocurrió a partir de enero, cuando los alcistas lograron reaccionar desde dicho soporte y llevaron la cotización hasta la zona de los 19 euros, nivel que además coincide con el 50% del retroceso proporcional de Fibonacci del tramo bajista previamente mencionado, es decir, una zona de resistencia horizontal fuerte y determinante.

Desde esa zona, el valor inició una nueva fase de caídas, aún más pronunciada, que ha llevado su precio nuevamente a buscar los 16 euros como nivel clave de soporte. Dado que el Ibex 35 podría estar comenzando a mostrar síntomas de agotamiento en el corto plazo, es posible que el flujo de capital procedente de valores con fuertes revalorizaciones acumuladas y gran sobrecompra se traslade hacia activos más castigados como Indra.

Hoy lunes, Indra intenta rebotar desde la zona de los 16 euros. Para confirmar que este movimiento no es un espejismo, el valor deberá recuperar cuanto antes los máximos alcanzados el pasado viernes, es decir, superar los 16,60 euros y cerrar por encima de ese nivel. Solo así podríamos confiar en un rebote técnico que logre anular parte de la última caída. Los actuales niveles de sobreventa son muy elevados, un factor que debería favorecer este escenario.

El primer objetivo de subida se sitúa en los 16,82 euros por acción, mientras que el segundo está en los 17,04 euros, donde se encuentra su media móvil de medio plazo. En cualquier caso, el valor no debería perder los mínimos del pasado viernes, es decir, no caer por debajo de los 16,00 euros en base cierres. De suceder, sería recomendable cerrar posiciones, tanto para quienes ya tengan títulos como para aquellos que apliquen esta estrategia planteada.