Wall Street inicia el segundo semestre del año a medio gas. La Bolsa de Nueva York inicia con tendencia mixta la sesión del lunes, una jornada que terminará antes de lo habitual al ser el martes festivo en el país, al ser la víspera del Día de la Independencia de Estados Unidos. Por este motivo, el martes no habrá actividad en el parqué neoyorquino.

Tras el toque de campana, el Dow Jones cedía un 0,33%, hasta los 34.290,33 puntos; mientras que el S&P 500 cedía un 0,16%, hasta los 4.443,27 enteros. Al mismo tiempo, el Nasdaq sumaba un 0,18% y alcanzaba los 13.815,93 puntos.

De esta forma, el selectivo tecnológico amplía el rally registrado en la primera mitad del ejercicio. El Nasdaq vivió su primer mejor semestre desde 1983 con un avance acumulado de casi el 32% gracias, en parte, al impulso de la inteligencia artificial (IA) dentro del sector tecnológico y al progresivo control de la inflación en Estados Unidos.

"Impulsadas por el frenesí de entusiasmo de la IA, un puñado de empresas tecnológicas se han convertido en imanes de dinero, desviando cualquier preocupación sobre el impacto de los altos tipos de interés y las turbulencias bancarias", destacan desde la firma Hargreaves Lansdown, según recoge Reuters.

Este lunes el impulso del Nasdaq venía de la mano de Tesla. El fabricante de coches eléctricos subía un 6,61% después de que las cifras de entregas en el segundo trimestre superaran las estimaciones del mercado.

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Exactamente, la empresa fundada por Elon Musk entregó un récord de 466.140 vehículos a nivel global en el segundo trimestre gracias a la estrategia de recortar precios para ganar volumen ha surtido efecto pese al impacto negativo que tuvo en un principio. La cifra final supone un crecimiento del 83% sobre el año pasado.

El cierre de la primera mitad del año trajo más buenas noticias a Wall Street: el selectivo S&P 500, en el que también cotizan muchas grandes tecnológicas, progresó cerca del 16% acumulado, lo que supone su mejor marca para este lapso desde 2019. El Dow Jones se quedó atrás y registró una tímida subida del 3,80% en el primer semestre.

La Fed

Los principales índices de Wall Street pusieron un broche positivo al semestre. Cerraron al alza la sesión del viernes ante la buena acogida del índice de precios de gasto de consumo personal (PCE, por sus siglas en inglés), una medida de inflación seguida por la Reserva Federal (Fed), que subió un 0,3% mensual y un 4,6% anual.

Las cifras, que los expertos atribuyeron al menor gasto de los consumidores, reflejaron la continuidad en la ralentización de la inflación, que invita a pensar en que la Fed podría poner fin pronto a su política de subida de los tipos de interés.

El próximo miércoles se publicarán las actas de la última reunión mantenida por el banco central estadounidense, en la que la institución presidida por Jerome Powell decidió mantener sin cambios los tipos de interés.

Los inversores también estaban pendientes de los índice ISM manufactureros y de servicios de junio, con sus distintos componentes de precios, empleo y nuevos pedidos.

Empleo

Aun con todo, el gran foco del mercado serán los datos de empleo de la economía estadounidense, con la publicación de las vacantes de empleo JOLTS y la encuesta de empleo privado ADP. Ambas referencias servirán como anticipo del informe oficial de empleo, que se publicará el viernes.

Aunque las previsiones apuntan a una cierta moderación de la creación de empleo en junio, hasta las 213 nuevas nóminas no agrícolas, desde las 339.000 del mes anterior, “es previsible que siga mostrando la fortaleza de la economía estadounidense”, apuntan desde Renta 4.