Indra cumple seis meses bajo la batuta presidencial de Marc Murtra. En estos cerca de 200 días, las turbulencias que se desencadenaron con el anuncio de su nombramiento han dado paso a un decidido y sostenido avance de la compañía tanto en negocio como en bolsa. En actividad, el foco se refuerza en tecnología de defensa y digitalización corporativa. En el parqué, avances acumulados de casi el 50%.

Las dudas que sembró el inesperado relevo de Fernando Abril-Martorell al frente de la tecnológica se han ido convirtiendo en un convencido voto de confianza por parte del mercado. Tanto que incluso su gráfica bursátil se ha aupado por encima de la cotización que marcaba antes de que se abriera el debate sucesorio en la tecnológica. Y los analistas aún le otorgan más recorrido alcista.

Cuando Murtra aterrizó en la presidencia de Indra, un nombramiento que se confirmó definitivamente el pasado 24 de mayo, las acciones de Indra cayeron hasta los 7 euros.

Ahora, seis meses después, su precio en el parqué sobrepasa los 10 euros por acción. Una remontada del 46% frente a la caída del 8% que en el mismo espacio de tiempo sufre el índice Ibex 35 del que la tecnológica forma parte como valor fuerte de la bolsa española.

Este acelerón es tan solo uno de los síntomas de que el actual presidente ha conseguido hacerse con el favor de los analistas, gestores e inversores. Otro igual de evidente que el primero es el hecho de que, mientras él desembarcaba, hasta tres firmas de inversión de las que conforman el consenso de Refinitiv recomendaban vender las acciones de Indra en cartera.

Consenso de compra

Actualmente, solo uno se decanta por la retirada como estrategia ganadora. Frente a eso, 12 firmas se decantan por la compra de las acciones de una compañía que en estos meses ha conseguido alzarse también como la empresa tecnológica más sostenible del mundo, según el reputado análisis de Dow Jones.

Como resultado de este cambio de perspectivas, los analistas que más de cerca escudriñan la evolución de Indra consideran que el rally está lejos de haber tocado techo. El precio objetivo de consenso que fijan para sus acciones alcanza los 11,61 euros, lo que todavía supone un potencial alcista desde su cotización actual que ronda el 14%.

Nuevos inversores

Una de las firmas de inversión que se ha dejado seducir por este tirón alcista de Indra fundamentado en la progresión de sus fundamentales ha sido Santander AM. La gestora del grupo financiero español ha entrado en las últimas semanas por primera vez en el capital de Indra hasta sumar un 3,037% de su capital social a través de cinco de sus vehículos.

El paquete inversor de la firma alcanza una valoración de 54,7 millones de euros en función de los precios actuales de mercado. Así, Santander AM ha pasado a engrosar una lista en la que ya figuraban gestoras internacionales como Fidelity (9,809%), Norges Bank (3,626%) y T. Rowe Price (3,112%).

Vuelve el dividendo

Unas posiciones que en varios casos se han reforzado ya con Murtra al timón de la compañía. En este sentido, el analista Iván San Félix, de Renta 4 Banco, destaca que “la buena evolución” de Indra en lo que va de año ha permitido al nuevo equipo directivo mejorar hasta por dos veces los objetivos previstos para este ejercicio en varias magnitudes. Concretamente, en beneficio antes de impuestos e intereses (Ebit) y en flujo de caja libre (FCF). Y también una vez en ingresos -sin considerar el efecto divisa-, hasta marcarse la meta de los 3.300 millones de euros.

Con estos números sobre la mesa, el equipo que comanda el presidente ha anunciado que volverá a proponer el pago de dividendo. Un factor determinante para muchos inversores en la búsqueda de rentabilidad asegurada en medio de los vaivenes del mercado.

La propuesta que el consejo de administración quiere llevar a la próxima junta general de accionistas pasa por el reparto de 0,15 euros por título. Un pago que, previsiblemente, se hará efectivo en julio del año que viene.

Estas proyecciones y las cifras que ya han ido viendo la luz tras el relevo al frente de la cotizada -como los 115 millones de euros de beneficio hasta septiembre- son las que han hecho posible “un muy buen movimiento alcista” en el parqué, como lo define Eduardo Bolinches, analista de Invertia.

En su opinión, la gráfica de la tecnológica “quiere hacer suelo después de las últimas correcciones”. Una tesis que, de confirmarse apoyada en sus números operativos, promete dar una mayor consistencia a la remontada que acumula con holgura en este último semestre. Un periodo en el que se corona como líder indiscutible en la tabla de revalorizaciones del Ibex 35.