El Ibex 35 estuvo cerca de recuperar los 7.000 puntos tras una pasada semana en la que llegó a perder casi un 6%. Ya sin el lastre de los resultados empresariales, sus principales sectores comenzaron a tomar aire y la banca logró sostener el selectivo español por encima del 1,4% hasta cerrar en 6.975 puntos.

Después de un comienzo en rojo, el selectivo ha logrado darse la vuelta gracias a los buenos datos españoles y europeos de manufactura y el rebote de la mayoría de los bancos. La bolsa española bajaba este mediodía el 0,51 % y se acercaba a 6.800 puntos condicionada por el retroceso de parte de los grandes valores.

De hecho, a las 12 horas, el índice de referencia de la bolsa nacional bajaba 35,4 puntos hasta 6.842 puntos. Las pérdidas anuales se elevaban entonces al 28,34%. No obstante, a pocas horas del cierre de la sesión, los indicadores comenzaron a mejorar volviendo a los números negros.

Ello, pese al lastre del sector turístico que ve como sus principales valores no resisten las malas noticias del aciago agosto que les espera por los rebrotes de la Covid-19.  Meliá perdió un 2,61%, mientras que IAG se dejó un 1,43%. Por el contrario, Amadeus recuperó un 1,70%.

Los grandes ganadores

Por su parte, el sector bancario sirvió de impulso tras sus buenos datos. Sabadell mejoró un 4,95%, Caixabank un 4,67%, BBVA un 3,3%, Bankia un 3,17%, Santander un 2,68% y Bankinter un 2,56%.

El farolillo rojo lo registró ENCE con una caída del 2,78%, seguido de Meliá e IAG. También perdieron Merlin con un 0,64%, Red Eléctrica con un 0,61%, Viscofan con un retroceso del 0,48% y Cellnex con una caída del 0,38%.

Por su parte, la actividad de las fábricas de la zona euro ha comenzado el tercer trimestre con un fuerte rebote en el mes de julio, según refleja el índice PMI manufacturero, con una subida hasta los 51,8 puntos desde los 47,4 del mes anterior.

Es la primera expansión del sector en la eurozona en año y medio, según los datos de IHS Markit, que sitúan a España, con 53,5 puntos, a la cabeza de la recuperación.