La buscaba y la ha conseguido. El Ibex 35 ha logrado su cuarta semana consecutiva al alza, pero se le ha resistido el broche de oro. Gracias al empuje de la banca y los valores industriales castigados en las sesión del jueves,el Ibex 35 ha cerrado en 9.185,2 puntos, con una subida del 0,38%. En la semana, el ascenso es del 1,25%, mientras que en lo que va de año la remontada alcanza el 7,56%. Pero -siempre hay uno- se le siguen resistiendo los 9.200 puntos en los que se asientan sus máximos de tres meses.

En algunos cruces sí ha llegado a cotizar por encima de esta marca, especialmente en la primera mitad de la sesión, pero la caída de grandes valores como Inditex (-1,23%), Endesa (-1,07%), Iberdrola (-0,59%), Telefónica (-0,23%) y Repsol (-0,03%) ha impedido coronarla al cierre. La banca ha resistido, sin embargo, la presión bajista que el sector vivió el jueves tras la reunión del Banco Central Europeo (BCE), en la que Mario Draghi empleó un tono aún más dovish (blando) que aleja en cierta medida las expectativas sobre las subidas de los tipos de interés que marcan en buena medida sus márgenes de negocio. 

Los expertos indican que el escenario muestra una señal de que hay que alejarse del sector, ya que si los tipos se mantienen en niveles actuales, los márgenes de la industria seguirán penalizados. Bankinter ha conseguido extender la euforia por sus resultados por encima de los 7 euros un 0,36% al alza. Además, los inversores han acogido con subidas del 1,97% el anuncio de Bankia para el incremento del dividendo del 5% este año, así como el de la reorganización de su estructura, que elevará a 12 el número de integrantes de su comité de dirección.

La entidad presentará el próximo lunes sus cuentas anuales, que los inversores esperan con especial interés ante las dudas sobre si finalmente será capaz de cumplir con su Plan Estratégico para 2020. En la semana le seguirán Santander, BBVA, Sabadell y CaixaBank, en una avalancha de presentaciones de las que los inversores tomarán buena nota. 

A la espera de la nueva ola de cuentas, la cuestión es saber hasta qué punto los mercados han descontado ya un escenario de crecimiento anímico y su impacto en estos resultados. “Aunque el BCE parece que descarta la entrada en recesión de la región, entendemos que los inversores no lo tienen tan claro”, advierten desde Link Securities. “Lo que sí descuentan los inversores es que no habrá subidas de tipos este año, algo que se plasma en el positivo comportamiento de los bonos, cuyas rentabilidades han vuelto a bajar a mínimos multimensuales con la del 10 años alemán por debajo del 0,20%”, recuerdan.

Sin embargo, ninguno de estos valores ha consguido la posición puntera del índice. Tal honor lo han conseguido ArcelorMittal (+5,54%), seguido ya sí del Sabadell (+4,4%), Técnicas Reunidas (+3,11%) y CaixaBank (+2,66%). La metalúrgica Acerinox ha remontado un 2,37% al cierre.

En el apartado empresarial también hay que destacar la fuerte subida de las acciones de Abengoa. Las de clase A se  han disparado un 11% y las B  han subido un 4,55% después de que la compañía haya anunciado ayer por la noche un plan de viabilidad a 10 años que ha sorprendido a los inversores. La compañía prevé facturar 1.488 millones al cierre del presente ejercicio, con lo que repetiría casi el resultado de 2017, cuyo beneficio estuvo condicionado por la reestructuración financiera acometida ese año. 

Las caídas más abultadas se las han apuntado Grifols (-2,14%), Merlin Properties (-1,65%) y Naturgy (-1,43%).

En el mercado de divisas, y tras descender el jueves después de escuchar al presidnete del BCE, el euro rebota este viernes. Se aprecia un 0,9%, hasta los 1,14 dólares. El bálsamo de Draghi se ha dejado notar una jornada más sobre el mercado secundario de bonos soberanos, donde los españoles aflojan su rentabilidad hasta el 1,24% frente al 0,2% de los 'bunds' alemanes de referencia. Así, la prima de riesgo se suaviza hasta los 104 puntos básicos.