EFE/Invertia

Una enmienda de última hora en una ley que nada tiene que ver es la artimaña a la que ha recurrido el Gobierno de Pedro Sánchez para acelerar el proceso que le permitirá levantar el veto del Senado al techo de gasto y, a partir de ahí, presentar los Presupuestos antes de fin de año.

Este martes, el grupo parlamentario socialista ha aprovechado que terminaba el plazo para presentar enmiendas a la Ley del Poder Judicial sobre medidas urgentes del Pacto contra la violencia de género para colar una enmienda que pide modificar la Ley de Estabilidad Presupuestaria. Dado que una Ley orgánica como la Ley de Estabilidad Presupuestaria puede ser modificada a través de otra Ley orgánica, tal como avala el Tribunal Constitucional, el grupo socialista se ha servido de ese proyecto de ley contra la violencia de género, que tiene ese rango, para agilizar el proceso.

La maniobra persigue levantar el veto que puede imponer el Senado a los objetivos de déficit y deuda pública. Y, sobre todo, lo que persigue es hacerlo de manera más rápida, ya que gracias a ella se acortarán los plazos para poder presentar los Presupuestos en noviembre.

Fuentes de vicepresidencia han señalado a Efe que la enmienda modifica el artículo 15.6 de la Ley de Estabilidad y está vinculada a la urgencia de aprobar cuanto antes los Presupuestos Generales del Estado de 2019. La tramitación de un proyecto de Ley se prolonga habitualmente tres meses hasta su aprobación definitiva por lo que la nueva senda de déficit más flexible, con la que se están elaborando las cuentas del próximo año, podría estar aprobada dentro del plazo.

Asimismo, desde vicepresidencia se añade que el hecho de enmendar una ley orgánica con el fin de modificar otra ley del mismo tipo es un procedimiento constitucional que ya se ha realizado en otras ocasiones, como cuando la Ley de Registro Civil se modificó con una enmienda a la ley de medidas urgentes para el crecimiento, la competitividad y la eficiencia.

UN CAMINO MÁS CORTO

Con este recurso, el Gobierno deja en 'fuera de juego' al Partido Popular y Ciudadanos, que con su mayoría en la Mesa del Congreso estaban frenando el ímpetu del Ejecutivo a la hora de acometer con urgencia la tramitación de la reforma de la Ley de Estabilidad. A partir de la argucia activada este martes, el reloj comienza a correr a favor del Ejecutivo, que gana un tiempo precioso para agilizar lapresentación de unos Presupuestos que resultan vitales para su propósito se completar la legislatura.

El registro de esta enmienda se ha producido el mismo día que el Pleno del Congreso ha aprobado tramitar la proposición de Ley presupuestaria presentada por el PSOE, Unidos Podemos, ERC y el Grupo Mixto y que ha sido apoyada por el PNV y el PDeCAT.

Es decir, el Ejecutivo ya tenía en marcha la maquinaria para modificar la Ley de Estabilidad. Pero este proceso suponía el 'camino más largo', puesto que abría un calendario de enmiendas hasta su aprobación definitiva. Ese calendario se presumía largo, sobre todo después de que la Mesa del Congreso rechazara recientemente que la proposición fuera tramitada por el procedimiento de urgencia y en lectura única.

No obstante, el PSOE, Unidos Podemos, ERC, PNV y Compromís registraron la semana pasada una petición para que la Mesa del Congreso, es decir, PP y Ciudadanos, reconsiderara su acuerdo de impedir la tramitación urgente y en lectura única argumentando que la Mesa decidió la tramitación ordinaria de esta proposición de Ley sin oír antes a la Junta de Portavoces.

Por si acaso no cambiaban de opinión, el Partido Socialista se ha movido para activar, en paralelo al otro, un 'camino más corto'. Y ha cogido un atajo para sacar adelante sus pretensiones. Y sus Presupuestos.