El año 2012 marcó un crucial antes y después en la vida de Gamesa. En mayo de ese año, Ignacio Martín se convirtió en el nuevo presidente de la empresa dedicada al sector eólico. Y en octubre, el nuevo equipo gestor marcó el nuevo rumbo de la empresa con un plan estratégico encaminado a centrar de nuevo el foco en la actividad industrial de la compañía y la reducción de la deuda. Hasta entonces, Gamesa penó en el mercado. Los inversores cortos o bajistas, aquellos que toman posiciones en un valor a la espera de que sus títulos caigan, lo sabían. Y en la primavera de 2012 llegaron a acaparar casi el 10% del capital de la empresa. La llegada de Martín y la hoja de ruta que diseñó terminaron espantando a los cortos, hasta el punto de que un año después ya no llegaban al 1%.

Hay que remontarse hasta aquella delicada situación, que desembocó en un cambio en el timón de Gamesa, para encontrar a los bajistas más que fuertes que ahora en el capital de la compañía fabricante de aerogeneradores. Según los datos difundidos esta semana por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), su presencia alcanza ahora el 6,76% del capital de la actual Siemens Gamesa, el porcentaje más alto desde mayo de 2012.

Las mayores posiciones corresponden a tres fondos. Marshall Wace sobresale con un 1,19% del capital. Le acompañan Capital Fund Management y Old Mutual Global Investors, ambos con un 0,59%.

CORTOS VS LARGOS

Esta presión, sin embargo, se está encontrando con un notable rebote de las acciones de la empresa. En el conjunto de las cuatro últimas jornadas han remontado un 9% -incluido el 0,4% sumado este miércoles- y han escalado hasta los 12,78 euros, el precio más alto desde mediados de junio.

Esta reacción desemboca en una subida del 12% en lo que va de año, con la que revierte parte de las fuertes caídas sufridas en 2017, en el que el valor se dejó un 36% en medio de los ajustes de la fusión entre la división eólica de Siemens y Gamesa y de las rectificaciones en las expectativas de beneficios.

Al contrario que los bajistas, los analistas creen que el futuro que aguarda a Siemens Gamesa es alcista. Según los datos que recaba Thomson Reuters, de los 22 analistas que siguen al valor, 10 aconsejan comprar sus acciones; 9, mantenerlas; y 3, venderlas. Además, el consenso de mercado le otorga un precio objetivo de 14,35 euros, con lo que le da un potencial del 12%.