El Ibex 35 se ha desmarcado de la atonía de sus vecinos europeos para cerrar la semana con ganacias del 1,66%. La frontera de los 10.350 puntos queda lejos aún pero con ganancias diarias no muy abultadas ha logrado ganar más de 165 puntos en los últimos cinco días.

En una sesión con una intensa agenda macroeconómica y un nuevo aluvión de resultados corporativos, los dos factores han contribuido al repunte del selectivo. La ruptura del pacto nuclear entre EEUU e Irán y la solicitud de ayuda de Argentina al Fondo Monetario Internacional (FMI) han provocado sesiones de cautela y escasa volatilidad, lo que ha ayudado a mantener la tendencia alcista.

Al frente del Ibex se ha situado ArcelorMittal, que ha recortado las ganancias de más del 4% de primera hora hasta el 2,5% al cierre. Después de las turbulencias causadas por la amenaza de guerra comercial, ha publicado unas cuentas trimestrales que han batido las previsiones del mercado en beneficio neto y operativo. La compañía siderúrgica ha publicado un beneficio neto de 1.192 millones de euros al cierre de marzo, un 19% más que hace un año, mientras que el Ebitda ha subido un 17,3% hasta los 2.512 millones de euros.

Al otro extremo, Siemens Gamesa, que se ha dejado un 1,8% hasta los 13,84 euros por acción. Las dos cotizadas siguientes en la lista de descensos también están entre las que este viernes han cotizado cuentas: Acciona (-1,7%) y Merlin Properties (-1,4%). La primera socimi que entró en el Ibex 35 empezaba la sesión ligeramente alcista al anunciar que ganó 114,1 millones en los tres primeros meses de 2018, un 71,5% más frente a las cuentas del mismo periodo en el año pasado.

Ferrovial ha sufrido un 0,8% abajo su entrada en pérdidas trimestrales debido a la provisión de contratos en Reino Unido. Los analistas han escrutado sus cuentas y Renta 4 concluye que ¿sigue la presión en márgenes¿. A pesar de haber anunciado un programa de recompra de acciones por hasta 19 millones de títulos o 275 millones de euros hasta el próximo noviembre, estas caen un 2,2%. La también constructora ACS ha cotizado sus resultados un 1,3% al alza a la espera de conocer el resultado de su opa por Abertis.

En el ámbito macroeconómico, dos referencias clave han visto la luz coincidiendo con el toque de campana de inicio de sesión. Al igual que ocurrió el jueves en EEUU, la cifra de inflación de abril en España da combustible alcista al parqué al haberse quedado en el 1,1% interanual que vaticinaban los analistas. Este registro, en línea con el de otros países europeos, sigue dando alas para que el Banco Central Europeo (BCE) mantenga su programa de estímulos. Del otro lado del Atlántico, desde Link Securities, la analista Paula Sampedro explica que "parece que los temores de que la inflación fuerce a la Fed a pisar el acelerador en su proceso de subida de tipos han pasado a un segundo plano".

La segunda referencia para el desayuno de los inversores ha sido la cifra de compraventa de viviendas, que bajó un 3,1% el pasado mes de marzo con respecto al año anterior. En total, se cerraron 39.579 operaciones en el tercer mes del año, según ha publicado el Instituto Nacional de Estadística (INE).

En el Mercado Continuo, Sacyr ha liderado sin discusión con alzas del 6,9% después de que su presidente, Manuel Manrique, ha garantizado la vuelta del grupo al pago de dividendos anuales ¿recurrentes¿ a través de pagos en modalidad `scrip¿ que permitirán a los inversores elegir entre el pago en efectivo o nuevas acciones, o bien combinar ambas posibilidades. Un 5,4% ha subido Prim tras anunciar la absorción de Anota sin necesidad de ampliar capital y un 5% ha ganado Solaria, que también ha cotizado sus números trimestrales.

Al otro extremo, pero por el mismo motivo, Talgo ha perdido un 4,6%. Vértice ha cerrado plano tras rechazar en junta de accionistas el contrasplit que le solicitó la CNMV.

Desde XTB, el analista Rodrigo García descarta la existencia de motivos "para que este escenario de compras predominantes se disipe", por lo que estima que la semana que viene el indicador por antonomasia de la bolsa española "se va a mover entre la horquilla de los 10.200 y los 10.500 puntos". En el horizonte, el dato de inflación de la Eurozona. Por su parte, Felipe López Gálvez, analista de Self Bank, comenta que el indicador madrileño "se pone como objetivo alcanzar los 10.600 puntos a los que cotizaba antes del desplome de finales de enero". Además, apunta que "la recuperación está siendo constante pero muy lenta, haciendo honor al famoso dicho de que la bolsa sube por las escaleras pero baja por ascensor".

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