Schäuble, hablando en una rueda de prensa después de que el gabinete aprobase los planes de gasto, rechazó las críticas que alegan que los recortes de 15.000 millones de euros anuales en en el impuesto sobre la renta hasta 2021 eran demasiado poco como para estimular el crecimiento a través del consumo.

"Una política fiscal modesta y fiable no deja mucho más espacio (para bajar impuestos)", dijo Schäuble. "Nuestros planes fiscales a medio plazo consideran la posibilidad de unas subidas del tipo de interés moderadas y estamos reservando provisiones", añadió el ministro.

El presupuesto todavía ha de ser confirmado por la cámara baja del parlamento después de las elecciones nacionales del 24 de septiembre.

Al ser preguntado sobre la decisión de Italia de liquidar a dos bancos regionales en quiebra en un acuerdo que podría costar al estado hasta 17.000 millones de euros, Schäuble dijo que la Unión Europea necesitaba revisar si las diferencias entre las leyes de quiebras bancarias y los régimenes de insolvencia nacionales habían creado lagunas.