El Ibex nota la incertidumbre política.

El Ibex nota la incertidumbre política. Chema Moya/EFE Madrid

Mercados ELECCIONES GENERALES 20D

Turbulencias: la Bolsa española registra su mayor caída en cinco meses tras el 20D

La prima de riesgo española subió moderadamente hasta los 122 puntos, pero los inversores castigaron el resultado del 20-D

21 diciembre, 2015 09:24
Rubén J. Lapetra Javier G. Jorrín

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La Bolsa española registró descensos generalizados en la jornada posterior a las elecciones generales del 20D, debido a la incertidumbre generada por los resultados: dejan un Parlamento fragmentado y con dificultades para construir mayorías de cara a un futuro Gobierno. Al cierre de la sesión, el Ibex 35, la referencia de la Bolsa española, se desplomó un 3,62%, hasta 9.365 puntos, arrastrado por esta incertidumbre que se abre sobre el próximo inquilino de Moncloa.

Se trata de la mayor caída en cinco meses. En concreto, desde agosto, cuando China hizo temblar a los inversores de medio planeta. El descenso postelectoral es mayor que cuando Rajoy ganó las generales el 20 de noviembre de 2011 con mayoría absoluta. Entonces bajó un 3,4%. También es mayor al roto de las elecciones catalanas de 2010 (-2,3%), aunque no supera a la caída del 15 de marzo de 2004, cuando Zapatero accedió por sorpresa a Moncloa (4,1%) días después del 11M.

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Los peores del día.

Los peores del día.

Las acciones que mas cayeron fueron las del banco catalán Caixabank, así como las del gestor aeroportuario Aena. En ambos casos, el golpe bajista fue más del 7%. Santander, que acaba de comprar el portugués Banif, cayó un 4,85%, hasta 4,48 euros. Banco Popular se desplomó un 6,9%, mientras que Bankia cedió un 5,1% de una sola tacada. El comportamiento del mercado español terminó por arrastrar al resto de bolsa europeas. Las plazas de Alemania, Italia y Francia se contagiaron de los números rojos españoles y también cerraron a la baja.

"La principal sorpresa fue que Ciudadanos tuvo menos apoyo del esperad, de manera que una potencial alianza de PP y Ciudadanos fracasó en obtener la mayoría absoluta. (...) "Creemos que estos resultados son peores de lo esperado. Pese a que la opción más probable es un Gobierno del PP, este será débil e insostenible. Aunque asistimos a un deterioro temporal de la prima de riesgo, no creemos que vaya mucho más allá (+20 puntos básicos) debido a las compras del Banco Central Europeo (BCE)", dijo en una nota a clientes Ignacio Méndez, director de Mirabaud Securities.

La prevista pérdida de la mayoría absoluta del Partido Popular (que pasa de 186 a 123 escaños) dibuja un escenario de pactos marcado por la irrupción de Podemos (69 diputados) o Ciudadanos (40). El PSOE baja también a 90 escaños (desde 110) y completa la caída del bipartidismo, que apenas llega al 50% de los votos desde el 76% de 2011. El actual presidente, Mariano Rajoy, dijo que iniciará los contactos para formar gobierno, si bien, ninguna de las otras tres grandes formaciones ha mostrado su disponibilidad a que el mandatario siga en La Moncloa.

"En nuestra opinión, la consecuencia más grave para el medio plazo se refiere al riesgo de inestabilidad debido a la coaliciones frágiles", advirtió en un informe previo a las elecciones el banco de inversión JPMorgan.

La prima se modera a media sesión.

La prima se modera a media sesión.

La prima de riesgo del país -que mide el diferencia de la deuda española a 10 años frente a la alemana- también se relajó hasta los 122 puntos, después de rozar los 130 puntos en la apertura de los mercados europeos, su nivel más alto desde octubre. Este índice mide la percepción de riesgo que tienen los inversores sobre la deuda española frente a un activo considerado seguro o sin riesgo, como las obligaciones alemanas.

La deuda pública española, que se ha situado a las puertas del 100% del PIB (más de 1 Billón de euros), ha vivido en un clima de tranquilidad en todo el año, debido a la continua acción del Banco Central Europeo (BCE). Sin embargo, el Tesoro español tiene que seguir acudiendo al mercado en 2016 para refinanciar su deuda -se prevén emisiones brutas de 230.000 millones de euros a lo largo del año que viene- y cubrir el déficit público que siguen generando las administraciones públicas.