Una oleada de huelgas amenaza con complicar las Navidades en los aeropuertos españoles justo ahora que han conseguido casi recuperar el tráfico perdido por la pandemia. El paro de los pilotos de Air Nostrum y el de los trabajadores de aeropuertos de Aena se suman al que Vueling protagoniza desde noviembre. 

La sección sindical del Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) en Air Nostrum anunció la convocatoria de una huelga del colectivo de tripulantes técnicos de vuelo (pilotos) en todas sus bases y centros de trabajo, para los días 22, 23, 26, 27, 29 y 30 de diciembre y 2 y 3 de enero. 

El motivo es el bloqueo en las negociaciones de su convenio colectivo. Sepla, que aglutina a más del 70% de los pilotos afectados por el conflicto y es el sindicato mayoritario en la negociación del VI Convenio de la compañía.

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Sepla ha indicado que la parte social ha presentado hasta tres propuestas de revisión salarial, pero la compañía “se ha mantenido inamovible” con un 0% y 3% de incrementos para los años 2022 y 2023, respectivamente, y además pretende “restar de dicho 3% cualquier avance o mejora, con lo que resulta clara la postura inmovilista de la parte empresarial, sin posibilidad de negociación alguna”. Desde Sepla denuncian la posición de bloqueo de la aerolínea, mientras que Air Nostrum pide “responsabilidad”.

Por otro lado, CCOO pretende llevar a cabo una huelga en algunas de las fechas claves de Navidad en los aeropuertos españoles para reclamar la recuperación de la paga por productividad. En concreto, han convocado una huelga para los días 22, 23, 30 y 31 de diciembre, así como para el 6 y 8 de enero, bajo la amenaza de continuar con las protestas durante el primer trimestre de 2023 y en la próxima Semana Santa.

La convocatoria se produce tras meses de conversaciones con las empresas del grupo Aena -Aena, Enaire y el Aeropuerto internacional Región de Murcia- y el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para recuperar este pago.

Así, reclama su recuperación para los más de 10.000 trabajadores del grupo, en un contexto marcado por la recuperación del tráfico aéreo, que ya ha recuperado los niveles de 2019, año récord antes de la pandemia. 

Huelga de Vueling

Estas dos huelgas se suman a la de Vueling. Stavla, el sindicato mayoritario de tripulantes de cabina de la aerolínea de IAG, mantienen una huelga que arrancó el 1 de noviembre y se alarga hasta el 31 de enero, en la que hay paros los viernes, domingos, lunes y festivos. 

Estos rechazaron el acuerdo que firmó la aerolínea de IAG con CCOO que fijaba un incremento salarial del 6,5%, correspondiente al incremento del IPC del año 2021. Este sindicato reclama una subida del 13,4% para 2022 y la compañía cree que es difícil de asumir.