Logo de ChatGPT en la pantalla de un teléfono móvil. Reuters
OpenAI completa su conversión en empresa con ánimo de lucro y renueva su alianza con Microsoft, que tendrá un 27%
Tras su reestructuración, la compañía propietaria de ChatGPT recibe una valoración de unos 500.000 millones de dólares.
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OpenAI ha completado este martes su reestructuración para convertirse en una empresa con ánimo de lucro. Una operación que ha contado con el apoyo de Microsoft, que se mantendrá como su principal accionista al quedarse con una participación de alrededor del 27% del capital.
La compañía propietaria de ChatGPT ha dado a conocer este martes su nueva estructura societaria, que le otorga una valoración de en torno a 500.000 millones de dólares (unos 430.000 millones de euros)
En concreto, la organización sin ánimo de lucro se denominará a partir de ahora OpenAI Foundation y tendrá una participación accionarial de aproximadamente 130.000 millones de dólares (unos 111.500 millones de euros) en su división con fines de lucro, que pasa a llamarse OpenAI Group PBC.
Esto supone que la primera se quede con alrededor de 26% del capital de la segunda, aunque también se ha asegurado la posibilidad de incrementar esta participación si el negocio sigue creciendo.
Por su parte, Microsoft, que llegó a tener una participación del 32,5% en términos diluidos en la organización con fines de lucro se quedará en esta nueva estructura con una participación del 27%, valorada en aproximadamente 135.000 millones de dólares (unos 115.800 millones de euros).
Según informa la prensa estadounidense, el 47% restante del capital de OpenAI Group PBC queda en manos de inversores y trabajadores, tanto actuales como antiguos.
La creadora de ChatGPT nació en 2015 como una organización sin ánimo de lucro. Sin embargo, en 2019 creó una filial con ánimo de lucro, pero con ganancias "limitadas", que le permitió empezar a atraer inversiones de capital privado que necesita para seguir desarrollando su inteligencia artificial avanzada.
Reestructuración
Ahora, una vez completada esta reestructuración societaria, en la que llevaba trabajando varios meses, OpenAI ya no tendrá limitada su capacidad ni para generar beneficios ni para captar inversión privada. De hecho, el mercado cree que este cambio podría facilitar la salida de la empresa a bolsa.
De forma paralela a este proceso, OpenAI ha renovado la alianza sellada en 2019 con Microsoft. El gigante tecnológico no sólo se consolida como su principal accionista, sino que asegura acceso a la tecnología de la startup de inteligencia artificial hasta 2032, incluidos sus modelos de inteligencia artificial (IA).
Por otro lado, OpenAI ha firmado un contrato para adquirir servicios de Azure, por un importe de 250.000 millones de dólares (unos 214.000 millones de euros), aunque Microsoft ya no tendrá un derecho preferencial para ser el proveedor en la nube de OpenAI.
