Lenovo, HP y Apple aumentaron sus reservas de ordenadores en EEUU en el primer trimestre por el temor a los aranceles

Un contexto que ha llevado a los principales fabricantes de ordenadores del mundo, como Lenovo, HP o Apple, a hacer acopio de dispositivos en sus almacenes en Estados Unidos en el primer trimestre de 2025, tal y como reflejan los últimos datos sobre el mercado de PCs publicados por las consultoras tecnológicas Canalys e IDC.

Hay que tener en cuenta que la inmensa mayoría de los productos electrónicos que se venden en el país norteamericano se fabrican fuera de sus fronteras. Y especialmente en China, país de referencia en cuanto al montaje de dispositivos tecnológicos y principal adversario de Trump en esta guerra arancelaria.

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Con este acopio de productos en sus almacenes, las principales marcas de ordenadores se aseguraban tener inventario suficiente para poder atender la demanda final durante un tiempo y evitar que tener que importar los productos pagando aranceles más elevados.

Algo que, finalmente, parece que no va a ocurrir. La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza publicó este sábado una larga lista de productos electrónicos, como teléfonos móviles, ordenadores o microprocesadores, que quedaban excluidos de los gravámenes a las importaciones, incluidos los que llegan a EEUU desde China. Además, la medida entra en vigor con efecto retroactivo desde el 5 de abril.

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Con esta medida, Trump reaccionaba a la preocupación de muchos consumidores estadounidenses, que en los últimos días habían corrido a las tiendas a comprar productos de fabricación extranjera, sobre todo aquellos que se hacen en China. Entre ellos, los dispositivos fabricados por Apple, como el iPhone o el Mac.

"Los envíos de ordenadores experimentaron un aumento en el primer trimestre de 2025, impulsados ​​por la aceleración de las entregas a Estados Unidos por parte de los proveedores, anticipándose a los anuncios iniciales de aranceles", afirmó Ishan Dutt, analista principal de Canalys, la firma de análisis propiedad de Omdia.

Crecimiento

En concreto, remarca que Lenovo y HP aumentaron sus envíos al país norteamericano en el primer trimestre en torno a un 20% y un 13%, respectivamente. "Esta estrategia preventiva permitió a los fabricantes y al canal abastecerse antes de posibles aumentos de costes, impulsando los envíos a pesar de la estabilidad de la demanda del usuario final", incidió Dutt.

Jean Philippe Bouchar, vicepresidente de IDC, apunta que la recuperación mostrada por el mercado de PC se debe a que tanto los proveedores como los usuarios finales se estaban preparando para el impacto de la guerra arancelaria. "En un primer trimestre relativamente libre de aranceles, todo el ecosistema intentó acelerar el ritmo de las entregas para evitar la primera ronda de aranceles y la volatilidad prevista para el resto del año", subraya.

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A nivel global, el aumento de los envíos a EEUU ha provocado que las ventas de ordenadores hayan aumentado un 9,4% en el primer trimestre de 2025, según Canalys. Un crecimiento muy superior al 3% registrado en el mismo periodo de 2024. Destacan en especial los incrementos registrados por Apple (22,1%) y Lenovo (10,7%).

Aunque su diagnóstico de la situación es similar, IDC es más conservadora en sus estimaciones y recoge una subida de los envíos en los tres primeros meses de 2025 del 4,9%, mayor que el 1,5% del primer trimestre de 2024. En su caso, las compañías que más crecieron fueron Apple (14,1%), Asus (11,1%) y Lenovo (10,8%).

Previsiones

La tendencia a acumular inventario se mantuvo en los primeros días de abril como consecuencia de la supuesta entrada en vigor de nuevos aranceles recíprocos el 9 de abril, que luego se suspendió durante 90 días, y el mantenimiento de los gravámenes a China, que ahora se han eliminado para muchos productos electrónicos.

Antes de conocerse esta última decisión de Trump, los analistas ya preveían que los envíos se desacelerarán en próximos trimestres, a medida que los niveles de inventario se normalizaran y los clientes tuvieran que pagar precios más altos por los productos.

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En este sentido, IDC señalaba que tanto la migración a Windows 10 como la demanda de dispositivos con inteligencia artificial (IA) seguirían reforzando la demanda en el mercado, pero admitían que "la incertidumbre en torno a los aranceles y la presión inflacionaria asociada, así como los riesgos de recesión global, afectarán negativamente" en los próximos trimestres.

Según destaca la firma de análisis Wedbush, las grandes tecnológicas como Apple, Nvidia, Microsoft y la industria tecnológica en general pueden "respirar aliviadas este fin de semana y hasta el lunes" tras el anuncio de Trump, pero recuerdan que todavía existe "una clara incertidumbre y volatilidad" en cuanto a las negociaciones con China.

Producción

En lo que se refiere a la producción, Canalys señala que los principales fabricantes ya comenzaron a diversificar su cadena de suministro durante el primer mandato de Trump y se espera que continúen alejándose de China hacia otros mercados como Vietnam, Tailandia e India, a pesar de que también se enfrentan a la imposición de aranceles.

"Para finales de 2025, se espera que la mayoría de los principales proveedores de PC hayan completado la transferencia de los envíos con destino a EEUU fuera de China, con el objetivo de mejorar la resiliencia de la cadena de suministro y mitigar el impacto de los aranceles", aseguran desde la firma.

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Por ejemplo, en su última presentación de resultados, Enrique Lores, consejero delegado de HP, afirmó que el 90% de los productos que la compañía venderá en EEUU se fabricarán fuera de China para finales de este año.

En esta línea, desde Wedbush apuntan que el anuncio de este sábado demuestra que las grandes tecnológicas estadounidenses "no tienen opciones" para cambiar su sistema de producción, ya que la cadena de suministro se encuentra esencialmente en Asia. "Sin estas exenciones, la industria tecnológica estadounidense habría retrocedido una década y la tesis de la Revolución de la IA se habría ralentizado significativamente", avisa.

Desde IDC añaden que el entorno es "demasiado volátil" para que las empresas tomen "decisiones comerciales drásticas". No obstante, añade que "están evaluando todo", desde el inventario disponible a la capacidad de fabricación por ubicación, pasando por las posibles oportunidades de redireccionar los envíos para reducir los aranceles de importación.

Por otro lado, la firma da por descontado que, aunque existen muchos factores que dificultan las previsiones y la planificación de la demanda, la mayoría, "si no todos", los aumentos de costes "se trasladarán directamente al consumidor".