Nord Stream
Alerta de la noruega Equinor por sabotajes a gasoductos y activos 'offshore' europeos como ocurrió con el Nord Stream
El objetivo es implantar sistemas de monitorización gracias a los cables de fibra para que actúen como una “red de sensores”.
Más información: Equinor invertirá unos 7.000 millones de euros al año para extraer más petróleo y gas y mantener su producción total
Miles de kilómetros de cables y tuberías cruzan los fondos marinos de Europa, transportando gas, electricidad y datos, y, por lo que ha advertido el servicio noruego de seguridad, PST (Norwegian Police Security Service o Politiets sikkerhetstjeneste), están desprotegidos.
Según ha publicado la energética del mismo país Equinor, la inteligencia rusa sigue llevando a cabo "docenas" de acciones de sabotaje y actividades disruptivas utilizando actores proxy desde finales de 2023.
Por eso, ha decidido implantar sistemas de monitorización distribuida en cables de fibra destinados a la protección de infraestructuras críticas, gracias al acuerdo que llegó el mes pasado con la empresa tecnológica Knowit.
El objetivo es que la fibra actúe como una “red de sensores” capaz de detectar vibraciones, perturbaciones e irregularidades que puedan indicar intrusiones, daños o intentos de sabotaje en tuberías, cables submarinos u otras infraestructuras.
No son los únicos. Investigadores financiados por la UE están desarrollando herramientas de vigilancia basadas en inteligencia artificial para proteger la vasta red de cables y tuberías submarinos que mantienen el flujo de energía y datos del continente.
Noruega es ahora la mayor fuente de suministro de gas a los mercados europeos y este año ha concedido participaciones en 53 nuevas licencias de exploración de petróleo y gas en alta mar a 20 empresas que invertirán 22.800 millones de euros en más perforaciones, un 6% más que el año pasado.
Las tres principales fuentes de importaciones de gas por gasoducto de la UE en el primer semestre del año fueron Noruega (55%), Argelia (19%) y Rusia a través de Turquía (10%), según datos de IEEFA (Institute for Energy Economics and Financial Analysis), además, de las importaciones desde Azerbaiyán.
Eólica marina y gas, los objetivos
La inversión en el sector de petróleo y gas de Noruega continúa en niveles récord y se centra principalmente en la perforación de producción en campos que se están desarrollando y ya están en funcionamiento, en lugar de en la exploración.
Pero en el norte de Europa no solo hay infraestructura gasista que podría sufrir ataques como ocurrió con los sabotajes a los gasoductos Nord Stream en 2022.
Con aproximadamente 40 GW de energía eólica marina ('offshore') ya en funcionamiento en Europa, una cifra que se espera que crezca exponencialmente hacia 2040, la energía eólica marina es ahora fundamental tanto para la transición verde como para la estabilidad de la red. Y también está amenazada.
El director del PST, Beate Gangas, ha dicho que "estamos en tiempos difíciles" y Rusia sigue siendo la "mayor amenaza contra la seguridad en Europa".
"Durante el último año, Rusia ha demostrado su determinación y capacidad para llevar a cabo operaciones de sabotaje en suelo europeo. Es probable que esto también afecte a Noruega", ha afirmado.
El PST aseguró que la inteligencia rusa continúa mapeando la infraestructura crítica de Noruega tratando de identificar sus vulnerabilidades.
Energía y OTAN
Combinando imágenes satelitales, datos de seguimiento de buques y, eventualmente, señales acústicas de los propios cables, los servicios de inteligencia noruega pretenden construir un sistema de alerta temprana para detectar actividades sospechosas en el mar.
El secretario general adjunto interino de Innovación Híbrida y Cibernética de la OTAN, James Appathurai, también ha dicho que "los rusos están llevando a cabo un programa que llevan décadas desarrollando. Se llama Programa Ruso de Investigación Submarina".
"Es un eufemismo para referirse a una estructura paramilitar, muy bien financiada, que está mapeando todos nuestros cables y oleoductos", según publica Euronews.
"Tiene los llamados barcos de investigación. Tienen pequeños submarinos debajo. Tienen vehículos no tripulados, sin tripulación, operados a distancia, buzos y explosivos."
A principios de noviembre se cortaron dos cables en el Mar Báltico entre Suecia y Lituania y otro entre Alemania y Finlandia, lo que alarmó inmediatamente a los Estados miembros y a la OTAN, preocupados por un posible sabotaje.
Desde la invasión rusa en Ucrania, varios gasoductos han sido víctimas de presuntos sabotajes, en particular los enlaces Nord Stream y Nord Stream 2 en septiembre de 2022 y el Balticconnector en octubre de 2023.
En los meses posteriores a la invasión, también hubo informes de avistamientos de drones y otras actividades alrededor de instalaciones de procesamiento de gas en tierra e infraestructura en alta mar en Noruega.
En octubre de 2022, se avistó un dron cerca de Karsto, tras una falsa amenaza de bomba contra la planta de procesamiento de Nyhamna el mismo día. Estas dos plantas son las dos principales instalaciones de procesamiento de gas en tierra de Noruega.
Noruega ha reforzado la presencia militar en su infraestructura de gas, con fuerzas armadas presentes y realizando patrullas alrededor de las instalaciones.