Redes eléctricas de alta tensión

Redes eléctricas de alta tensión Invertia

Observatorio de la Energía

Zaragoza reducirá el vertido de electricidad hasta 2030 gracias a los centros de datos; Cáceres y Badajoz liderarán las pérdidas

Políticas como la retirada de centrales nucleares entre 2028 y 2029 y los refuerzos de red programados ayudarán a contener algo el vertido solar.

Más información: Récord de generación renovable 'tirada' sin usar en julio: superó el 10% al no poder entrar en el sistema por saturación de redes

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El anuncio del plan del Gobierno para mejorar y modernizar el sistema eléctrico podría ser un bálsamo para reducir los "vertidos", es decir, la energía que no se puede consumir ni almacenar en el momento de su producción. Sin embargo, aún pasarán años hasta que se vean sus efectos mientras cada vez se tira más energía.

Según un informe de Aurora Energy Research, consultora internacional especializada en análisis de mercados energéticos, "se espera que los vertidos de red aumenten entre 2025 y 2030, impulsados principalmente por la rápida expansión de la capacidad renovable".

Y serán Badajoz y Cáceres, por un lado, por el exceso de energía solar fotovoltaica, y Zaragoza, por otro, por los parques eólicos, principalmente, los que concentrarán el mayor nivel de vertido.

Sin embargo, "en el caso de Zaragoza se prevé una reducción de vertidos, gracias a una mayor capacidad de transmisión y a todos los proyectos de centros de datos que han solicitado un punto de acceso y conexión de demanda, si se materializan", dice a EL ESPAÑOL-Invertia Mario Prinetti, Research Associate de esta consultora.

"En julio de 2024, España registró más de 1.000 TWh de vertidos en fase 1 del mercado diario, lo que representa ya un 68% del volumen acumulado en todo 2024, cuando en España el consumo eléctrico anual ronda los 240 TWh".

Sin embargo, "este fenómeno es altamente dependiente del nodo de la red: por ejemplo, el nodo de Valdecaballeros 400 (Badajoz) perdió un 21% de su energía en julio pasado". En Zaragoza algunos nodos alcanzarán hasta un 5% de vertido sobre su energía en 2030, mientras que otros no superarán el 1%, e incluso habrá nodos sin vertidos.

Es decir, se muestra una importante heterogeneidad nodal, es decir, dentro de una misma provincia, los resultados son dispares, además de ir variando a lo largo del año. Los meses de más calor, también se producen más vertidos.

Vertidos y cierre nuclear

Aurora Research también ha hecho una modelización de un escenario en el que se continúa con el plan de cierre de centrales nucleares, -comenzaría en 2027 cerrando el reactor 1 de Almaraz (Cáceres)- y eso abriría la puerta a que entre en el sistema más generación fotovoltaica por los nudos extremeños.

"Las políticas como la retirada de centrales nucleares (2028-2029) y los refuerzos de red programados ayudarán a contener parcialmente el crecimiento de los vertidos solares. Aun así, la tendencia ascendente persistirá", asegura el informe.

Por ejemplo, con el cierre de Almaraz, mejorará mucho la red a su paso por Ciudad Real. "Se observa una subida importante de 'curtailment' hasta 2027, y si se cierra la central, se observa cómo se relajaría el sistema y caerían los vertidos", asegura el experto de Aurora Energy Research.

También ocurriría algo parecido con los nodos congestionados de la provincia de Lérida si se siguieran cerrando centrales. "El cierre de la central nuclear de Ascó que comenzará con Ascó 1 en octubre de 2030, también abrirá la puerta a mejorar la red que se conecta con otro gran núcleo de población que es Barcelona", añaden.

Aunque Prinetti puntualiza que "el problema de los vertidos no es el exceso de generación (ni por fotovoltaica ni por nuclear), sino el retraso en la conexión de la demanda", y en ese caso, la convivencia entre todas las tecnologías sería la opción más equilibrada.

"El PNIEC (Plan Nacional de Energía) preveía un aumento de demanda que no se ha producido, mientras que la oferta, es decir, la capacidad renovable instalada buscaba responder a esos objetivos", señala.

Por otro lado, la Propuesta de planificación eléctrica 2026-2030 presentada por el Ministerio para la Transición Ecológica plantea actuaciones de mejora en el 21% de la red y nuevos ejes para cohesionar y vertebrar más el territorio, con especial incidencia en zonas rurales.

Estos refuerzos, por otro lado, facilitarán la integración de las renovables y el almacenamiento previsto –incluidos 6,6 GW de hidroeléctrica reversible–, limitando los vertidos esperados al final de la década al 3,3%.

Olas de calor y baterías

Otra de las razones del colapso que se producen en los nudos eléctricos en España tiene que ver con el cambio climático.

"Cada vez hay más olas de calor en verano y más duraderas, y es un hecho científico que las altas temperaturas afectan la eficiencia de los componentes eléctricos, lo que limita la capacidad de transmisión de energía que se produce, especialmente desde Badajoz -con temperaturas que superan diariamente los 40º- a Madrid, el principal núcleo de demanda de la península", subrayan.

Y como hay mucha distancia respecto a los principales centros de demanda (como Madrid), las pérdidas se disparan en estos meses estivales.

Todo esto evidencia la necesidad de un análisis nodal detallado, que modele la red eléctrica real y permita identificar qué puntos sufren más, así como el impacto del despliegue renovable, los refuerzos de red y el crecimiento de demanda y almacenamiento, dice la consultora.

En su informe, destacan que las perspectivas para 2030 son una mayor capacidad de transmisión, se prevé una reducción de vertidos en ciertas provincias, siendo Zaragoza la que más descenderá.

Sin embargo, varias provincias se mantendrán en el rango de alto vertido debido al desajuste entre el despliegue renovable y la capacidad de red disponible. Son: Badajoz, Zaragoza, Cáceres, A Coruña y Soria. En contraste, Navarra, Ciudad Real y Valladolid mantendrán niveles bajos de vertido, concluye.