
Fotomontaje de Donald Trump y un campo de petróleo.
Los aranceles dibujan dos años de presión para el crudo: precios en torno a 60 dólares y un mercado cada vez más saturado
El precio del Brent sube un 2% en la última sesión, hasta los 66 euros, aunque registra una caída del 11% en lo que va de abril.
Más información: La OPEP corrige su previsión de demanda de petróleo en 2025 y 2026 ante un menor crecimiento por los aranceles
La guerra arancelaria ha provocado en las últimas semanas una oleada de recortes en las perspectivas sobre el petróleo por parte de firmas financieras y organismos internacionales. Los análisis más recientes anticipan dos años complicados para el oro negro, con un mercado saturado, precios que se mantendrán en torno a los 60 dólares por barril e, incluso, caídas hasta los 40 dólares en un escenario de recesión.
La Agencia Internacional de la Energía (AIE) y la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) recortaron sus previsiones de demanda global. La AIE redujo drásticamente su estimación de crecimiento para 2025 en 300.000 barriles diarios, dejándola en 730.000, y proyectó un aumento aún menor para 2026, de apenas 690.000 barriles. La OPEP también recortó en 150.000 barriles por día sus pronósticos para 2025 y 2026, hasta 1,3 millones y 1,28 millones respectivamente.
"El mercado de petróleo se encamina hacia el mayor exceso de oferta desde la pandemia de Covid", recogen los análisis de Scope Ratings. El drástico recorte de las previsiones de demanda, unido al reciente aumento de la producción de petróleo por parte de la OPEP llevarán "al Brent por debajo de los 60 dólares por barril", auguran.
"Estos precios relativamente bajos del petróleo, si se mantienen a lo largo del tiempo, tendrán consecuencias adversas para la calidad crediticia de las IOC (compañías petroleras internacionales)", advierten.
Goldman Sachs —que ha aplicado dos recortes sobre sus previsiones en una semana— también prevé "grandes excedentes" para el mercado este año y el próximo, por el impacto en la demanda de la guerra comercial desatada por Donald Trump.
El banco estadounidense prevé que el precio del Brent se sitúe en una media de 63 dólares por barril durante el resto de 2025, y descienda a 58 dólares en 2026. Además, no descarta que los precios caigan por debajo de los 40 dólares a finales del próximo año en caso de una recesión y si los países de la OPEP+ revierten los recortes actuales en la producción de crudo.
En este escenario—aunque “improbable”, según los analistas—, el Brent podría desplomarse hasta su precio más bajo desde noviembre de 2020, momento previo al repunte provocado por los avances en las vacunas contra la Covid.
Las recientes revisiones de JP Morgan apuntan en la misma dirección: el banco redujo su previsión para 2025 a 66 dólares por barril y su estimación para 2026 a 58 dólares.
UBS también recortó sus proyecciones, situando el precio del Brent en 66 dólares para 2025 (seis dólares menos), 65 dólares en 2026 (siete menos) y 70 dólares en 2027 (tres dólares menos).
Aun así, advierten: "Vemos un rango de precios del Brent más amplio de 50-75 dólares/barril a corto plazo, dado que los factores de la reciente debilidad podrían revertirse o resultar aún más negativos".
Otra revisión destacada es la de HSBC, que ahora estima un precio de 68,5 dólares por barril para 2025 y 65 dólares para 2026. A su vez, firmas como Morgan Stanley y Citi también han rebajado sus estimaciones, situándolas en torno a los 60 dólares por barril.
Últimos repuntes
El barril de Brent cayó la semana pasada a cerca de los 60 dólares, su nivel más bajo en cuatro años, en medio de crecientes temores a una recesión. Aunque logró recuperar parte de la caída en las sesiones siguientes, las perspectivas de la Agencia Internacional de la Energía frenaron el rebote. En lo que va de abril cae un 11%.
Cabe apuntar que este miércoles el crudo se recuperó un 2%, alcanzando los 66 dólares por barril, al calor de rumores sobre nuevas conversaciones comerciales entre China y Estados Unidos, así como por un informe que apunta a que Irak reducirá su producción de petróleo en abril.