La vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, durante una reunión en Bruselas

La vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, durante una reunión en Bruselas

Observatorio de la Energía

Ribera esgrime el "éxito" de la excepción ibérica para convencer a Bruselas de una prórroga hasta 2024

La vicepresidenta tercera y su homólogo portugués se reúnen con Vestager para pedir oficialmente la extensión de este mecanismo hasta finales de 2024.

18 enero, 2023 16:34
Bruselas

La vicepresidenta tercera y responsable de Transición Ecológica, Teresa Ribera, esgrime el "éxito" de la 'excepción ibérica' y el gran ahorro que ha logrado en la factura de la luz como principal argumento para convencer a la Comisión Europea de que autorice su ampliación hasta finales de 2024.

Ribera ha iniciado su ofensiva para prorrogar la 'excepción ibérica' este miércoles en Bruselas con una reunión con la vicepresidenta ejecutiva y responsable de Competencia, la liberal danesa Margrethe Vestager, la responsable de decidir sobre la prórroga. Le acompañaba su homólogo portugués, José Duarte Cordeiro.

Para persuadir a Vestager, la vicepresidenta le ha mostrado "algunas cifras tremendamente concluyentes que constatan el éxito de la solución ibérica", según han relatado fuentes del ministerio de Transición Ecológica. El dato más destacado es que este mecanismo ha permitido ahorrar 4.577 millones de euros en la factura de la luz a hogares y empresas españoles desde junio de 2022 hasta el 8 de enero.

[España pedirá a Bruselas prolongar la 'excepción ibérica' para topar el gas al menos hasta finales de 2024]

El objetivo del encuentro con la vicepresidenta de la Comisión era allanar el terreno para un acuerdo a nivel político sobre la prórroga del mecanismo ibérico. Pero de la reunión, que ha durado una hora y media, no ha salido ningún resultado concreto. Vestager "ha acogido de forma positiva las exposiciones de España y Portugal", pero no se ha comprometido a nada. Ninguno de los tres han querido comparecer ante la prensa.

"Se ha tratado de una primera reunión positiva entre las partes, para iniciar formalmente el proceso que determine la posible prórroga del mecanismo. Durante el encuentro, se ha analizado el existoso funcionamiento de la solución ibérica, desde que entrara en vigor el pasado 8 de junio de 2022", ha dicho el ministerio de Transición Ecológica en un comunicado.

"La Comisión es muy consciente de las dificultades causadas por la actual crisis energética resultante del ataque injustificado de Rusia contra Ucrania y está dispuesta a evaluar urgentemente la compatibilidad de las medidas de emergencia en este contexto", asegura una portavoz del Ejecutivo comunitario.

Ahora corresponde a los equipos técnicos de la Comisión analizar los argumentos y las cifras aportados por España y Portugal. Un trabajo previo que debe concluirse antes de que Madrid y Lisboa notifiquen formalmente a Bruselas la petición de prórroga. Todavía hay bastante tiempo, ya que la actual autorización no vence hasta el 31 de mayo.

Los líderes europeos dieron luz verde a la 'excepción ibérica' durante una cumbre celebrada a finales de marzo de 2022. Este mecanismo consiste en topar el precio del gas utilizado en la generación de electricidad, lo que se traduce en una rebaja inmediata del precio mayorista de la luz. La diferencia entre el precio de mercado y el precio topado se financia con un recargo en la factura.

Tras el visto bueno del Consejo Europeo, Vestager todavía tardó más de dos meses en autorizar formalmente la solución ibérica. En principio, la extensión hasta 2024 que piden ahora España y Portugal debería ser más fácil y rápida de tramitar: ya no se trata de una novedad absoluta, sino de una medida vigente sobre la que ya hay experiencia. Bruselas prorroga de forma habitual y casi automática centenares de planes nacionales de ayudas públicas.

El problema podría surgir con el cambio de parámetros que reclaman ahora Madrid y Lisboa. El tope al gas autorizado por la Comisión era de 40 euros por megavatio hora durante los seis primeros meses. Pero a partir de ahora irá subiendo en 5 euros al mes, hasta alcanzar los 70 euros en mayo. Ribera y Cordeiro quieren volver a la casilla de salida y fijar de nuevo un tope "lo más bajo posible", de entre 45 y 50 euros.