La ausencia de lluvias en España empieza a ser realmente preocupante. Hace más de un mes que no cae lluvia generalizada en nuestro país, apenas una gota. "La situación hídrica es muy crítica, el nivel es dramático a principios de año", explican desde la consultora Antuko, especializada en mercados energéticos. 

"Baja el precio de la luz en Europa porque en el norte se están produciendo borrascas que traen mucho viento, pero no se ha podido aclopar en España por la congestión de las interconexiones, así que vamos a pagar más por la electricidad que nuestros vecinos".

Sin 'valle' en primavera

"Estamos en un escenario bastante crítico en niveles hídricos, no se espera casi viento y, por eso, el gas sigue marcando el precio en el mercado diario", explica a EL ESPAÑOL-Invertia Jordi Martínez, experto en el sector energía y socio director en la consultora AEC (Advanced Energy Consulting & Optimize Energy).

"Normalmente, los meses de febrero, marzo y abril suelen ser meses 'valle', es decir, que coincide con una mayor capacidad hidroeléctrica, entra más recurso eólico y se suele deprimir el precio de la electricidad, pero este año no va a ser así, la curva es muy plana". 

El mercado de futuros apunta a que el precio para el segundo trimestre será de 194 euros/MWh, el tercer trimestre de 195 euros/MWh y el cuarto trimestre de 194 euros/MWh. "El gas marcará el precio en la mayoría de las horas".

Según los expertos en meteorología Pelmorex Corp., este año hidrológico (desde el 1 de octubre hasta el 30 de septiembre), los cuatro primeros meses registraron un 33% menos de lo que es habitual. Es uno de los diez primeros tercios de año hidrológico más secos desde que hay registros, y uno de los cinco más secos en lo que va de siglo. Hay que matizar que hay zonas, como el noroeste de Castilla y León o las Canarias, donde no se ha llegado ni a la mitad de lo normal.

"Por un lado, es bueno porque baja la demanda de gas, al no hacer tanto frío, pero por otro lado, es bastante malo para la generación eólica porque, cuanto más haya, más baja el precio de la luz", continúa Jordi Martínez.

Y la fotovoltaica, pese a su crecimiento, todavía no es suficiente. "Sirve para bajar relativamente el precio en las horas centrales pero no es capaz de generar un descenso generalizado en el mercado diario". 

Más gas de Rusia

La evolución alcista de los precios energéticos, y también de las materias primas, tiene que ver con el efecto postpandemia. "Es una dinámica de mercado rara por la paralización de la actividad económica", dice el experto. Comenzó con el confinamiento y las restricciones de movilidad en el inicio de la propagación del coronavirus y, después, con la reactivación. 

"Va a costar volver al equilibrio en 2022, y 2023 será un año de transición hasta ver precios más normales". 

Como punto positivo, el mercado de futuros del gas en Europa, el TTF holandés, se mantiene en la horquilla de los 70-80 euros/MWh. "No solo es que el invierno no está siendo crudo, sino también que hay menos producción industrial, como consecuencia de los precios altos del gas", continúa por su parte Antuko. 

Y aunque parezca paradójico, Rusia está bombeando más gas de lo esperado. "Gazprom está enviando más gas a Europa por el gasoducto de Ucrania y también por el NordStream 1, superando los 100 millones/m3 al día", asegura la consultora. 

"Si nada cambia, a finales de febrero se conseguiría llegar a los niveles mínimos de almacenamiento de gas de los últimos cinco años en las reservas europeas". Actualmente están en un 36%, algo inferior a la media de años pasados.

Por último, "también hay una calma tensa en los mercados, están esperando a ver qué pasa con el conflicto de Ucrania", puntualiza el experto de AEC. "También hay más flujo que llega de EEUU y venimos de un escenario de precios muy altos, pero aun así habrá que esperar a ver cómo se desarrollan los acontecimientos".