Los primeros ejecutivos de 12 empresas punteras de la industria europea bajo la asociación European CEO Alliance, con la española Iberdrola y su presidente, Ignacio Sánchez Galán, entre ellos, han unido sus fuerzas. Quieren impulsar una iniciativa para fomentar la descarbonización de la economía y la sociedad en Europa.

Se basan en los objetivos del Acuerdo de París para 2050, el Pacto Verde de la UE y una mayor ambición para los objetivos climáticos de la Unión.

Los miembros de la European CEO Alliance representan sectores industriales clave en el Viejo Continente y, junto a Iberdrola y Galán, figuran empresas como la energética italiana Enel, con su consejero delegado Francesco Starace; la automovilística alemana Volkswagen AG, con su presidente Herbert Diess; así como los primeros ejecutivos de las también germanas E.ON y Siemens; la suiza ABB, las neerlandesas AkzoNobel y Philips, la sueca Scania, la danesa Maersk y la francesa Schneider Electric.

En concreto, este grupo de empresas cuentan con planes de descarbonización de más de 100.000 millones de euros en los próximos años para cumplir con los objetivos europeos. Asimismo, acumulan más de 600.000 millones en ingresos anuales y dan empleo a 1,7 millones de trabajadores.

La alianza ha celebrado su primer encuentro en Stuttgart, donde sus miembros han coincidido en su apoyo al 'European Green Deal' y han considerado factibles los nuevos objetivos climáticos de la Comisión Europea, que prevén una reducción de emisiones del 55% para 2030.

La reunión inaugural de la European CEO Alliance se inició con una conversación con el vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, Frans Timmermans.

Tras una carta conjunta inicial a la Comisión Europea en junio de 2020, este primer encuentro dio muestras de la voluntad común de actuar deprisa para reconocer la urgencia de la necesaria transformación hacia la competitividad futura, indicó la iniciativa en un comunicado.

Durante la reunión, Galán apuntó que para combatir la crisis climática y maximizar los beneficios medioambientales y económicos de una recuperación verde "es necesaria una acción unificada que atraviese fronteras y negocios".

Por ello, el ejecutivo de Iberdrola subrayó que la European CEO Alliance supone "un firme compromiso por parte de algunas de las mayores empresas del mundo". Aemás, tiene "el objetivo de trabajar conjuntamente para defender de forma activa la adopción de medidas ambiciosas en relación con el clima, crear puestos de trabajo y sentar las bases de una economía más fuerte y sostenible para Europa".

Galán aseguró que la descarbonización de las economías y empresas sólo se producirá "si promovemos intensamente la electrificación mediante energías renovables en Europa e invertimos masivamente en redes y almacenamiento". "El cambio climático es una emergencia mundial, por lo que necesitamos a todos a bordo para combatirlo", añadió.

Objetivos viables

La alianza intersectorial, por su parte, ha apuntado que los objetivos climáticos de la UE "son viables".

"Nuestros sectores no entorpecen el cambio, sino que lo fomentan hacia una economía neutra en carbono. Vemos crecimiento potencial para todas las industrias a largo plazo. Si gestionamos adecuadamente esta transformación histórica, tendremos como resultado un desarrollo sostenible y unos empleos orientados hacia el futuro", destacó el grupo.

En concreto, cada miembro de la alianza ha definido su propia estrategia de descarbonización, reduciendo las emisiones a largo plazo de sus cadenas de valor y ofreciendo productos y servicios sostenibles a sus clientes. Para alcanzar sus respectivos objetivos de CO2, la European CEO Alliance estima que se requieren actividades intersectoriales.

En este sentido, se han identificado colaboraciones potenciales en seis campos que van desde los sistemas energéticos, donde abogan por la necesidad de incrementar la generación renovable y modernizar las redes; a la movilidad y transporte, con una apuesta por extender la red de recarga para vehículos eléctricos y potenciar el transporte o envío de mercancías de bajo carbono.

Estos campos potenciales señalados por el grupo se completan con la producción de impacto cero -en particular para los componentes de generación de energía renovable- y la producción sostenible de baterías en los procesos de fabricación e industriales; así como en el área de edificios y entornos urbanos una mayor atención en las oficinas de emisión cero y en la planificación urbana sostenible; unos nuevos modelos de negocio focalizados en el seguimiento del carbono con tecnologías digitales en la cadena de suministro y las oportunidades que abre la financiación sostenible.

Consenso público

Además, los miembros de la European CEO Alliance señalan que la transición hacia un futuro de cero emisiones netas de carbono "únicamente puede llevarse a cabo a partir de un consenso público".

Por ello, la alianza de primeros ejecutivos está dispuesta a contribuir a este consenso y a "construir un contrato social, intensificando el diálogo entre grupos de interés del sector privado, el sector público y la sociedad civil".

En paralelo, en el mismo encuentro, los miembros hicieron un llamamiento a los líderes políticos para generar el respaldo político y los incentivos necesarios.

Además, el grupo mostró su convencimiento de que una descarbonización y colaboración intersectorial ambiciosas requiere también marcos normativos "ambiciosos e intersectoriales", como un sistema de fijación de precios del carbono con un precio mínimo base en el régimen de comercio de derechos de emisión de la UE. Se trata de una reforma del régimen fiscal de la energía y un impulso a la demanda de soluciones sostenibles, innovadoras y digitales, a través de la puesta en marcha de planes de renovación y de contratación e inversiones públicas.