A la espera de que se les asigne un administrador concursal, la dirección de la compañía en España es quien se está moviendo para encontrar soluciones. En principio, habría interés por parte de algunos fondos en comprar Poly, según confirman fuentes cercanas a la dirección. Aunque no pueden desvelar nombres todavía. 

No obstante, otros ya habrían descartado esta opción. Uno de ellos es el fondo Black Pearl Capital, quien tuvo sobre la mesa el caso de Poly pero que rechazó reflotar la juguetera. "No hemos hecho oferta ni la haremos. No nos encaja", aseguran.

[Poly Juguetes solicita el concurso de acreedores y anuncia el despido colectivo de la plantilla en España]

Hace unos días, Pablo Badía Merino, director general de la compañía en España aseguraba que estaban hablando con potenciales inversores con un plan de viabilidad para la juguetera. 

"Tras elaborar un plan de viabilidad sostenido realista y sujeto a la incorporación de palancas comerciales hasta ahora no permitidas por la propiedad actual, el equipo directivo de Teal Retail Spain / Poly juguetes, sigue apostando por la viabilidad del negocio y por lo tanto cuenta con que toda la plantilla pudiera mantener sus puestos de trabajo", señaló en su cuenta de LinkedIn.

Dicho plan prevé volver a vender los domingos, así como comercializar licencias de Harry Potter que hasta ahora estaban prohibidas, entre otras medidas.

Y lo cierto es que en las últimas semanas los contactos con inversores se han intensificado, así como las reuniones entre la dirección y el comité de empresa para transmitir la idea de que se está buscando una solución para Poly y que puede haber interés de algunos inversores.

La idea es que una vez que tengan ese inversor el propietario británico valore la oferta y, en el mejor de los casos, la acepte. 

De hecho, la compañía ya superó dos concursos de acreedores en 2012 y en 2018. El último fue precisamente salvada por The Entertainer (Grupo Teal Retail). Y ahí es donde se agarran los trabajadores para no perder la esperanza.

Concurso de acreedores

Cabe recordar que el pasado 18 de marzo, el Grupo Teal Retail, propietario de la empresa desde 2018, anunció a la plantilla la puesta en marcha de un concurso de acreedores junto con un despido colectivo. Este afecta a 186 trabajadores que trabajan en sus 28 tiendas, además de almacenes y oficinas. 

El grupo británico alegó la inviabilidad de la empresa por las pérdidas acumuladas de la compañía que superan los 15 millones. Además, dos de los auditores de la juguetera ya dudaron de su viabilidad años atrás. 

Con esta situación, Poly está a la espera de que se les asigne un juez y un administrador concursal. Mientras tanto, la matriz británica está siendo asesorada por la firma de abogados Cuatrecasas.