Santander aún no ha decidido qué va a hacer con la marca de TSB una vez culmine su compra. Se trata de una enseña con más de 200 años de historia que se ha mantenido pese a tener distintos propietarios y que Santander podría decidir no absorber para no perder cuota de mercado.
La operación aún está en su primera fase, dado que requiere la autorización de los accionistas del banco catalán, sus actuales propietarios, para que se proteja el deber de pasividad al que está obligada la entidad por la opa que BBVA lanzó sobre el grupo hace un año y que sigue en curso.
La transacción se cerrará la próxima primavera, por lo que el comprador aún tiene tiempo para decidir si mantiene la histórica marca o integra el negocio en Santander UK, su filial en Reino Unido, haciendo desaparecer para siempre a TSB.
Normalmente, Santander apuesta por su propia marca en los negocios en los que está presente. Así, al menos, es en la actualidad. Sin embargo, TSB ha sobrevivido a varios propietarios, como Lloyds o Sabadell, por lo que está muy integrada en la mentalidad de los clientes.
En todo caso, la entidad que dirige Ana Botín va a valorar si quedarse la marca o no en función de lo que más le convenga para poder mantener su cuota de mercado conjunta, que es uno de los objetivos del grupo con esta compra.
"Estamos analizando si convendría quedarnos con las dos marcas o sólo con una. Para nosotros lo que es muy importante es no perder mercado", afirmó Héctor Grisi, consejero delegado de Santander, durante la presentación de los resultados semestrales del miércoles.
"Como anillo al dedo"
Los gestores de Santander se mostraron muy satisfechos con la adquisición durante la presentación, pues consideran que TSB va "como anillo al dedo" a su negocio en Reino Unido.
No en vano, Santander UK va a pasar de ser el quinto banco por cuentas corrientes al tercero gracias a esta compra. En cuota de mercado de hipotecas, serán cuartos.
"La adquisición de TSB la verdad es que nos cae perfectamente, nos viene como anillo al dedo. Es un banco muy parecido al nuestro", defendió Grisi, para quien la integración entre ambos es "relativamente fácil de llevar a cabo".
Lo difícil, según dijo, será la integración tecnológica, la "de los sistemas". Hay que recordar que, al traspasarse de Lloyds a Sabadell cuando el banco catalán adquirió TSB hace diez años, esta fusión generó múltiples problemas que llevaron a la entidad a tener que pagar millonarias indemnizaciones y multas.
Para el CEO de Santander, la unión entre ambos es "complementaria". Él mismo puso como ejemplo la región de Escocia, donde TSB está consolidado, pero Santander no tiene una presencia muy importante.
El banco, según contó, tampoco ha decidido aún si será necesario acometer un ajuste de empleo significativo en la entidad británica debido a esa complementariedad que les une. "Es muy temprano (...) Lo iremos viendo conforme vayamos avanzando en el proceso", dijo.
