No sólo de imposición se ha hablado en los encuentros. Sobre le mesa también han estado el papel del sector en la distribución de los fondos Next Generation EU y la creación de la Autoridad de Defensa del Cliente Financiero, según informan fuentes conocedoras de dichos encuentros a EL ESPAÑOL-Invertia.

Por el momento, el ministro ha estado ya con Ana Botín (Santander), Carlos Torres (BBVA), José Ignacio Goirigolzarri (CaixaBank), Josep Oliu (Sabadell), Manuel Azuaga (Unicaja Banco) y Antón Arriola (Kutxabank).

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Este jueves se reunirá con Eduardo Baamonde (Cajamar) y con Nadia Calviño, su antecesora y presidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI). El encuentro con María Dolores Dancausa, consejera delegada de Bankinter, está pendiente de fecha.

De acuerdo con varias fuentes conocedoras, los encuentros se han desarrollado en un tono "agradable", "cordial", "constructivo" y "de diálogo".

Hay que tener en cuenta que los banqueros ya conocían a Cuerpo, con el que habían mantenido varias reuniones durante su etapa como secretario general del Tesoro, previa a la toma de la cartera de Economía.

Estos encuentros están configurados como una primera toma de contacto en la que el ministro está teniendo la oportunidad de tender puentes con el sector en un momento de cierta tensión por la prórroga del impuesto y el lanzamiento de la Autoridad del Cliente Financiero. Están siendo más un espacio para el diálogo que para tomar decisiones o adoptar compromisos, según trasladan estas fuentes.

Un impuesto no discriminatorio

Desde su nombramiento, Cuerpo ha enfatizado su vocación de continuar con la línea de su predecesora en el cargo. Es por eso que el plan previsto para el impuesto a la banca es hacerlo en permanente, como ya explicó Pedro Sánchez, y eso no va a cambiar ahora. Así lo ha transmitido el ministro al sector.

Los representantes de la banca, por su parte, han pedido a Cuerpo que en el proceso de tramitación del cambio legislativo necesario para hacer el impuesto permanente se tenga en cuenta la posibilidad de que el gravamen afecte a todo el sector y no solamente a los bancos más grandes, según informan fuentes conocedoras de las conversaciones.

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Hay que recordar que están excluidas del pago del tributo aquellas entidades que en el año 2019 registraron ingresos por intereses y comisiones inferiores a 800 millones de euros. Es el caso de ING y otros bancos extranjeros con filial en España.

Esta circunstancia ha llevado en los últimos meses a muchos banqueros a criticar en diferentes foros que el impuesto es "discriminatorio" y que la aportación del sector a las arcas públicas debería ser equilibrada y repartida entre todas las entidades.

El papel de la banca en los fondos UE

Otro de los temas que se está tratando en estas reuniones es el papel de la banca en la distribución de los fondos del programa Next Generation EU y, en concreto, de los préstamos de la Adenda del Plan de Recuperación.

La banca dispone de una gran capilaridad en todo el país por su extensa red de sucursales, a través de las cuales las entidades se ofrecen a hacer llegar a sus destinatarios los fondos que llegarán a través de préstamos.

Eso podría agilizar la puesta en marcha de las inversiones. Con este objetivo y de acuerdo con fuentes conocedoras, la banca ha solicitado a Cuerpo que se concrete cuál va a ser el papel del sector.

Por último, en estas reuniones también se está tratando la creación de la Autoridad de Defensa del Cliente Financiero, proyecto que Economía relanzó justo antes de la salida de Nadia Calviño del departamento y que es uno de los temas prioritarios para el Ministerio.

De hecho, el pasado martes el Consejo de Ministros dio luz verde a la tramitación por vía de urgencia del anteproyecto de creación de este organismo, cuya aprobación definitiva decayó hace unos meses con la convocatoria de elecciones generales cuando faltaban apenas unos días para terminar los trámites. Un proyecto que la banca ha criticado desde el inicio.