La Asociación Española de Banca (AEB) aboga por un modelo de supervisión de twin peaks, en el que haya dos grandes supervisores de solvencia y conducta, por lo que anima a preguntarse si merece la pena crear una nueva autoridad precisamente el día en que el Gobierno ha aprobado el anteproyecto para la puesta en marcha de la Autoridad del Cliente Financiero.

"Es un tema de cómo se organiza. Hay que ver si merece la pena una nueva autoridad o podemos usar las autoridades existentes para tener un sistema más eficaz", ha apuntado José María Roldán en la que es su última rueda de prensa como presidente de la AEB.

De hecho, en su opinión, es mejor un sistema en el que el Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) asuman la supervisión de las entidades financieras "que genere menor inflación de autoridades". "Ese modelo encaja mejor con las prácticas europeas y un modelo de protección es más del ámbito anglosajón", ha apuntado Roldán.

José María Roldán durante su última intervención como presidente de la AEB. Carlos Luján Europa Press Madrid

La autoridad creada este martes impondrá una tasa de 250 euros por cada expediente abierto que tendrán que asumir los bancos, algo que Roldán considera que no debería ser así.

Con todo, reconoce que "el sector financiero en general siempre ha estado bajo una regulación muy estricta" y que "es una parte que va con el negocio".

Además, las resoluciones de esta autoridad, que unificará los servicios de reclamaciones del Banco de España, la CNMV y la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones, serán vinculantes para la entidad cuando los importes reclamados sean inferiores a 20.000 euros.

Por su parte, la CECA, la otra patronal de la banca, ha enviado un comunicado en la misma línea tras la creación de la Autoridad del Cliente Financiero. "Desde el sector siempre hemos defendido un modelo institucional twin peaks con arreglo al cual la protección integral del consumidor financiero debería corresponder a la CNMV, sin necesidad de crear una nueva agencia pública". Con todo, se ha mostrado "siempre a favor de que se avance en el marco de la protección del cliente de servicios financieros".

Cambio de presidente

Este martes, la asamblea de la AEB ha elegido oficialmente a Alejandra Kindelán como nueva presidenta. Con anterioridad a la rueda de prensa de Roldán, la que será representante de los bancos durante los próximos cuatro años se ha mostrado "muy agradecida" a las cinco grandes entidades que la han elegido, así como a Roldán por su "legado".

Roldán, por su parte, le ha recomendado que se prepare "para lo inesperado", dado que "los cisnes negros ya llegan una vez cada dos años o uno". Un consejo que ha añadido al que Miguel Martín, su antecesor al frente de la patronal bancaria, le dio a él: "Que se diferencie lo máximo posible y cambie el ritmo de presidir la AEB".

Roldán ha hecho un pequeño balance de sus ocho años al frente de la patronal, durante los cuales considera que algo ha mejorado la reputación del sector. Sobre su futuro, ha bromeado con que aún tiene que trabajar hasta los 67 años y probablemente más. "Sigo estando activo y buscaré durante los próximos meses o años", ha dicho.