La vicepresidenta primera de la Comisión y responsable de Competencia, Teresa Ribera
Bruselas multa con 157 millones a Gucci, Chloé y Loewe por imponer a los comercios los precios de venta
El Ejecutivo comunitario denuncia que estas prácticas se traducen en un aumento de precios y menos opciones para los consumidores.
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La Comisión Europea ha impuesto este martes una multa de 157 millones de euros a las marcas de moda de lujo Gucci, Chloé y Loewe por imponer a los comercios minoristas los precios de venta de sus productos, tanto a través de internet como en tiendas físicas.
Estas prácticas vulneran las normas de competencia de la Unión Europea y se traducen en un aumento de precios y un recorte de las opciones para los consumidores, según denuncia Bruselas.
"En Europa, todos los consumidores, compren lo que compren y donde lo compren, ya sea online o en tiendas físicas, merecen beneficiarse de una competencia real en precios", ha dicho la vicepresidenta primera de la Comisión y responsable de Competencia, Teresa Ribera.
"Esta decisión envía un mensaje contundente a la industria de la moda y más allá: no toleraremos este tipo de prácticas en Europa. La competencia justa y la protección de los consumidores se aplican a todos por igual", sostiene Ribera.
La investigación de Bruselas ha revelado que estas tres empresas incurrieron en una práctica denominada mantenimiento del precio de reventa (RPM, por sus siglas en inglés).
Eso significa que Gucci, Chloé y Loewe restringieron la capacidad de sus minoristas de fijar sus propios precios para casi toda la gama de productos diseñados y vendidos bajo sus marcas, incluyendo ropa, artículos de cuero, calzado y accesorios.
Las infracciones, que se produjeron entre 2015 y 2023, abarcan todo el espacio económico europeo.
En concreto, las tres empresas interfirieron en la estrategia comercial de sus minoristas imponiéndoles límites como: no desviarse de los precios de venta recomendados, no superar determinados niveles de descuento o limitar los períodos de rebajas.
En algunos casos, incluso prohibieron temporalmente ofrecer descuentos. Gucci, Chloé y Loewe buscaban que los minoristas aplicaran los mismos precios y condiciones que ellas mismas utilizaban en sus canales de venta directa.
Para asegurar el cumplimiento de sus políticas de precios, las tres empresas vigilaban los precios de los comercios y actuaban cuando detectaban desviaciones.
"Estas prácticas anticompetitivas privaron a los minoristas de su independencia para fijar precios y redujeron la competencia entre ellos. Al mismo tiempo, Gucci, Chloé y Loewe buscaban proteger sus propias ventas frente a la competencia de sus distribuidores", señala la Comisión.
Además, Gucci impuso restricciones específicas a las ventas en línea de una línea de productos, solicitando a sus minoristas que dejaran de venderlos en internet, a lo que estos accedieron.
Las prácticas ilegales finalizaron en abril de 2023, cuando la Comisión realizó inspecciones sorpresa en las sedes de las tres compañías.
Aunque las tres empresas actuaron de manera independiente, los períodos de infracción se solapan y muchos minoristas afectados vendían productos de las tres marcas.
Las tres compañías se han beneficiado de descuentos de hasta el 50% en sus respectivas multas por haber colaborado en la investigación y por reconocer los hechos y su responsabilidad, lo que ha permitido cerrar el caso mediante el procedimiento de conformidad.
En concreto, Gucci tendrá que pagar 120 millones de euros, mientras que la sanción para Chloé asciende a 20 millones y la de Loewe a 18 millones.