
Pedro Sánchez conversa con Josu Jon Imaz durante la reunión mantenida con empresarios en Davos. La Moncloa
"Estarás contento con la votación", el guiño de Sánchez a Imaz en Davos para sellar la paz por el 'impuestazo'
El presidente del Gobierno y el CEO de Repsol coincidieron en la reunión con empresarios españoles.
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Pedro Sánchez llegaba este miércoles a Davos con ganas de firmar, un año más, la paz con los empresarios españoles. Una cita a puerta cerrada que se ha convertido en tradición y que sirve para que -al menos- de cara al exterior las diferencias queden aparcadas en pos de atraer nuevos inversores.
El primero en llegar era Ignacio Galán, presidente de Iberdrola, que prescindió del discurso central de Sánchez para irse directamente a la sala de reuniones. Allí fueron llegando poco a poco el resto de actores invitados: Carlos Torres, presidente del BBVA; Francisco Reynés, presidente de Naturgy; José Manuel Entrecanales, presidente de Acciona; Héctor Grissi, CEO del Santander; Martin Wetselaar, CEO de Moeve; Onur Genç, CEO del BBVA; Jaime Lamet, presidente de la Cámara de Comercio EEUU en España (AmChamSpain)...
También Josu Jon Imaz, CEO de Repsol, que según relatan quienes estuvieron allí se quedó sorprendido cuando llegó Pedro Sánchez. A bocajarro, entre risas y con tono socarrón le espetó: "¡Estarás contento con la votación de hoy!".
Interpelación directa al rechazo por el Congreso con el voto del PP, Junts, PNV y UPN de la prórroga al impuestazo energético... Y que permitía un momento distendido para intercambiar opiniones entre ambos, en el que el CEO de Repsol defendió la posición que ha venido manteniendo durante estos meses.
¿Cuál? Que el impuesto al sector energético haría caer la inversión a mínimos en España; que el sector refinero se vería muy afectado y que, con ello, se estarían destruyendo miles de empleos industriales. Con todo lo que ello supone, dado que la industria proporciona trabajos bien pagados y de larga duración, además de dar estabilidad a la economía de un país.
Encuentro de Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, con empresarios españoles en Davos.
Postulados que Imaz ha defendido en artículos en prensa, pero también de viva voz. Ha sido la cabeza visible de la oposición al impuesto energético, y quien avisaba de que su empresa estaba dispuesta a llevarse de España más de 8.000 millones de inversión prevista.
Un trabajo que parece haber dado sus resultados, a la vista de lo conseguido. El 'impuestazo' no saldrá adelante. Y pese a que, como informa Laura Ojea en EL ESPAÑOL-Invertia este jueves, los grupos de izquierdas vayan a seguir insistiendo en la necesidad de adoptarlo, no parece que el presidente del Gobierno esté en ese mood.
Basta con fijarse en el comentario que hizo durante esa conversación con Josu Jon Imaz, y que terminaba con un "hay que mirar al futuro". Desde luego, toda una declaración de intenciones. O, al menos, así se interpreta entre los asistentes del sector energético que estaban presentes en el encuentro.
Una breve conversación que fue el preludio de la reunión con todos los empresarios españoles invitados. Tiempo hubo para hablar de la economía española, de los retos y oportunidades de la transición energética y también de la importancia de abordar la reindustrialización.
La cita transcurrió en un clima de cordialidad. Y eso que había quien pensaba que podía haber tiranteces por lo ocurrido en Telefónica el pasado fin de semana. No fue así, el tema ni siquiera sobrevoló una cumbre que fue algo más corta que en años anteriores.
Acaba Davos. Vuelve la normalidad, y veremos si el clima que allí se respira se mantiene o los enfrentamientos entre Gobierno y empresarios vuelven a ser la tónica general.
Por cierto, echarán ustedes en falta en esta cita a la presidenta del Santander, Ana Botín. No crean que dio plantón. Tenía una reunión previa que se retrasó y llegó tarde a la cita. Es la agenda en Davos. El año pasado, en cambio, sólo pudo pasarse a saludar porque tenía un encuentro a la misma hora. Davos... Davos...