Esta iniciativa está destinada a promover el desarrollo económico y social del Sáhara Occidental. El plazo para solicitar las ayudas se abrió el 18 de marzo y estará en vigor hasta el 17 de mayo como parte del Programa de Promoción del Crecimiento Económico Inclusivo de la Iniciativa de Asociación de Estados Unidos para Oriente Medio (MEPI).

La financiación total estimada del programa es de 1.500.000 dólares, aunque la dotación individual oscila entre los 200.000 y los 500.000 dólares, y están previstas dos adjudicaciones para fomentar el empleo y la formación.

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La convocatoria de subvenciones de la MEPI y la Fundación Greater Washington Grants recuerda que, al depender en gran medida de la agricultura, la pesca, las energías renovables, el turismo y la minería de fosfato para obtener ingresos, “la región (Sáhara Occidental) es susceptible de sufrir una desconexión entre los ciudadanos y el gobierno cuando la principal fuente de ingresos procede de un recurso natural y no de los propios ciudadanos”.

Asimismo, señala que “la dependencia excesiva de estas industrias limita el crecimiento del sector privado y contribuye a la baja tasa de participación de las mujeres en el mercado laboral”.

Las propuestas competitivas apoyarán actividades dirigidas a comunidades desatendidas, entre las que se incluyen mujeres, jóvenes y personas con discapacidad. Los beneficiarios deberán recibir una combinación de formación en habilidades sociales y laborales y formación empresarial.  Se valorarán positivamente las propuestas que tengan un enfoque innovador y/o resultados concretos, como la obtención de puestos de trabajo o la creación de empresas.  Las propuestas pueden hacer referencia a experiencias previas pertinentes. 

Este proyecto apoyará a la sociedad civil de Dajla y El Aaiún “mediante el desarrollo de las capacidades profesionales de los participantes”.

Dentro del Sáhara Occidental, las propuestas pueden tratar de cubrir una amplia zona geográfica o centrarse en centros urbanos específicos, pueblos más pequeños o zonas rurales. Los solicitantes deberán explicar la elección de la ubicación en su petición. 

“El progreso gradual en estas áreas es posible gracias a una población informada y empoderada. El proyecto también contribuirá a crear las condiciones económicas que, a su vez, permitan a asociaciones y empresas organizarse y dirigirse a los funcionarios locales para tratar cuestiones y asuntos importantes para ellos, ya sea la asignación de recursos o la igualdad de género”, explican en la convocatoria.

Solicitudes

El Departamento de Estado de EEUU, en particular la Oficina de Coordinación de la Asistencia de la Oficina de Asuntos de Oriente Próximo (NEA/AC) ofrece asistencia federal a grupos e individuos que se esfuerzan por lograr un cambio positivo en la región de Oriente Próximo y África del Norte (MENA).

Los proyectos seleccionados por concurso tienen como objetivo “fomentar la gobernanza participativa, la reforma económica y el avance educativo en respuesta a los intereses y necesidades locales”, mantienen en el pliego de solicitudes.

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Finalmente, evaluará el éxito del programa mediante resultados concretos mensurables entre los beneficiarios. “Incluyen, pero no se limitan, a la mejora de las habilidades enseñadas, el número de puestos de trabajo obtenidos, y el número de pequeñas empresas creadas durante el período de ejecución del programa”, se detalla en la instancia.

Los solicitantes pueden ser estadounidenses o extranjeros: organizaciones sin fines de lucro, organizaciones con fines de lucro, instituciones privadas de educación superior, organizaciones internacionales públicas, y pequeñas empresas con función y experiencia regional en las áreas de educación y desarrollo humano en la región MENA.

Todas las peticiones deberán presentarse en inglés. La Oficina de Coordinación de la Asistencia trabaja en 20 países y territorios, asociándose con gobiernos, organizaciones de la sociedad civil, líderes comunitarios, jóvenes y mujeres activistas y grupos del sector privado para impulsar sus esfuerzos.