Durante los últimos años estamos siendo protagonistas de algunos de los acontecimientos más convulsos del último cuarto de siglo: una pandemia mundial, la erupción de un volcán y una guerra. Todos nuestros planes se derrumban como un castillo de naipes construido bajo los cimientos más inestables de las últimas décadas.

Una situación que inevitablemente repercute es nuestro bolsillo y afecta a la estabilidad de cualquier mercado: España sufrirá una inflación elevada todo el año, con una media anual no vista desde hace 3 décadas. Los economistas calculan que la variación de la media anual del Índice de Precios de Consumo (IPC) de 2022 ascenderá al 5,4%. Habría que remontarse al año 1992 para encontrar una tasa similar.

Ante la elevada inestabilidad actual, muchas personas que se encuentran hipotecadas (no debemos olvidar que el año 2021 marcó un importante hito: se contrataron más hipotecas fijas que nunca, el 70% de los cerca de 350.000 créditos hipotecarios concedidos, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística (INE)) y otras tantas que están a punto de hacerlo, se plantean multitud de dudas.

El rumbo que tomará el mercado hipotecario en los próximos meses dependerá de las decisiones que tome el Banco Central Europeo (BCE), ya que, es indudable que el conflicto bélico en Europa del Este traerá más inflación y menos crecimiento económico y, quizá, se tomen medidas para mantener controlados los precios sin perjudicar al crecimiento económico. Es decir, puede que el BCE se vea obligado (o no) a subir tipos para frenar la escalada de la inflación.

¿Esto en qué se traduce? El alza del Euribor -el índice de referencia de la mayoría de los préstamos en España- ha provocado una tendencia alcista en la oferta hipotecaria. En contra de esta tendencia generalizada de subidas de tipos, Tomamos Impulso, iniciativa que surge de la unión de tres entidades - el banco TARGOBANK y las aseguradoras Agrupació y Atlantis-, mantiene firmes las condiciones en las nuevas contrataciones de sus hipotecas a tipo fijo, con el objetivo de ofrecer estabilidad a todos sus clientes en un momento de extrema incertidumbre.

Las hipotecas de tipo fijo han sido durante el año 2021 la opción por excelencia de los usuarios que se aventuraban en una hipoteca y esto se debe a la tranquilidad que confiere a los clientes que prefieren pagar una cuota estable y no depender de las idas y venidas del Euribor que suponen los tipos variables. Por esta razón y teniendo en cuenta que los usuarios, debido a la confianza que confieren este tipo de préstamos, se decantan preferiblemente por ellos, TARGOBANK mantiene las condiciones de las nuevas contrataciones de hipotecas a tipo fijo para seguir ayudando a aportar estabilidad a los clientes que confían en la entidad.

Según los analistas, las condiciones de 2022, y más tras la situación actual, no serían tan buenas como en el 2021, pero está claro que aún sigue habiendo opciones favorables que, en la medida de lo posible, nos confieran una tranquilidad relativa ante lo que es uno de los proyectos vitales más emocionantes a lo largo de una vida: la creación de un hogar.