Abengoa ha presentado las cuentas de 2020 con beneficios de 15,3 millones, frente a las pérdidas de 487 millones de 2019, y lo hace a menos de un mes de que la oferta de Terramar deje de ser vinculante. 

Además, el resultado consolidado ha recortado sus pérdidas en un 77%, pasando de los 566 millones de euros de 2019 a los 129,39 de 2020, según se recoge en el informe remitido por la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Abengoa, que se encuentra bajo administración concursal y pendiente del que sería su rescate, tenía pendiente la aprobación y presentación de estas cuentas de 2020. Para ello, el juzgado autorizó hace dos semanas al administrador concursal, Ernest and Young, a aprobar cuantas cuentas fuesen necesarias. 

Negocios fuera de la UE

La cifra de negocio fue de 9,72 millones de euros, un 36% menos que en el año 2019. Por áreas geográficas, la práctica totalidad de la cifra de negocios (9,68 millones de euros) provino de fuera de la Unión Europea (UE).

Sobre los negocios, el de Ingeniería y Construcción tuvo unos ingresos de 1.007,9 millones de euros (un 15% menos) y el de Infraestructuras concesional de 242,6 millones de euros (un 21% menos).

El negocio de Ingeniería y Construcción redujo sus pérdidas un 80%, al pasar de 615,25 millones en 2019 a 121,49 millones en 2020; mientras que el resultado del de Infraestructura concesional también ha disminuido un 73%, al registrar un saldo positivo de 18,55 millones en 2020 frente al de 70,79 millones en 2019.

Menos trabajadores

La plantilla media de Abengoa también se redujo un 19% y pasó de 14.399 empleados en 2019 a 11.641 en 2020. Además, las remuneraciones de los consejeros también se redujeron un 62% y las de los directivos lo hicieron en un 45%.

Trabajadores de Abengoa en una manifestación.

Las deudas con entidades de crédito y obligaciones u otros valores negociables aumentaron un 0,8%, mientras que el patrimonio siguió siendo negativo en 2020 en el entorno de los 5.000 millones de euros.

Prefieren una oferta española

La única oferta vinculante con la que cuenta Abengoa es la del fondo estadounidense Terramar, que dejará de ser vinculante el 31 de diciembre. El presidente de la compañía, Clemente Fernández, ha dejado claro en varias ocasiones que, antes que una oferta Terramar, prefiere una propuesta española.

"Seguimos trabajando en una alternativa de mejor calidad y que garantice la españolidad del grupo. Será el Consejo de Abengoa S. A. el que apruebe la operación sobre la filial", afirmó Fernández en su perfil de LinkedIn después de que Terramar Capital cambiase las reglas del juego hace unos días.