En el ultimo trimestre del pasado año, la petrolera logró un beneficio neto de 3.118 millones, muy por encima de los 438 millones del mismo periodo de 2016.

Por acción, la compañía obtuvo unas ganancias de 4,85 dólares, frente a las pérdidas de 0,27 dólares de 2016, cuando sufrió la crisis que afectó al sector por los bajos precios del crudo.

En 2017, la firma con sede en San Ramón (California, EE.UU.) tuvo una facturación de 134.674 millones de dólares, un 22 % más que el año anterior.

En la cifra, sin embargo, se incluye una ganancia de algo más de 2.000 millones de dólares asociada a la reforma fiscal aprobada en Estados Unidos.

Aunque esa cifra extraordinaria hace difícil la comparación, la mayoría de analistas consideraba hoy que las cuentas están por debajo de lo esperado.

Como consecuencia, las acciones de Chevron se dejaban un 3,40 % una hora después de la apertura de la Bolsa de Nueva York.

La petrolera tuvo entre octubre y diciembre una facturación total de 36.381 millones de dólares, un 21 % más que el año anterior, y su producción creció un 5 %.

Chevron espera que esa tendencia continúe durante 2018, cuando anticipa que su producción crezca entre un 4 y un 7 %.