El expresidente de Abengoa, Felipe Benjumea.

El expresidente de Abengoa, Felipe Benjumea. Efe

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Benjumea culpa al Santander de la caída de Abengoa al forzar su cese

El expresidente de la sevillana cree que su salida cambió las condiciones de la ampliación de capital prevista, y eso espantó a muchas entidades financieras.

17 octubre, 2017 15:36

El expresidente de Abengoa Felipe Benjumea ha reiterado hoy que al forzar su cese, el Santander provocó la caída del valor de las acciones y la interrupción de los contratos de aseguramiento y de las líneas de liquidez precisas para acometer una ampliación de capital, asegurar su viabilidad y evitar el concurso.

Benjumea, acusado de administración desleal y para el que el fiscal solicita cinco años de prisión, ha achacado al director general de Santander España, Rodrigo Echenique, toda la responsabilidad por la entrada en concurso de la empresa, en noviembre de 2015, al forzar su cese en septiembre de ese año.

El relato de Benjumea se ha remontado al verano de 2015, cuando la sociedad decidió acometer una ampliación de capital para la que contaba con suficiente liquidez y con las garantías de contratos de aseguramiento necesarios.

El relato de Benjumea

En el Consejo de Administración del 13 de septiembre se aprueba "todo lo necesario" para garantizar el contrato de aseguramiento de la ampliación de capital, así como cuestiones de gobierno corporativo relativas entre otras, al número de consejeros independientes, todo ello con el acuerdo de los bancos.

Pero un día después, el presiente del Santander España, Rodrigo Echenique, le hace saber que "debe irse", y que el banco no va a participar en la operación si Benjumea permanece como presidente.

Este presenta su renuncia como presidente y es cesado como consejero, lo que inmediatamente provoca la desconfianza del mercado y una fuerte caída del precio de los títulos de Abengoa en bolsa; lo que ocurre a continuación, según su relato, es que algunos de los bancos que se habían comprometido a respaldar la ampliación de capital dan un paso atrás, al haber cambiado de forma tan drástica las condiciones previas.

Todo ello, ha relatado, es lo que abocó a Abengoa a solicitar su entrada en concurso de acreedores en noviembre, la misma empresa que pocos meses ante gozaba de una sólida posición y del respaldo de entidades financieras como HSBC o Crédit Agricole, además del Santander.

El juicio

Santander, ha relatado, había aprobado a finales de junio todas las operaciones de riesgo con Abengoa, y ese mismo mes el banco concedió a la empresa líneas de crédito por 270 millones de euros, por lo que el drástico "cambio de opinión de la entidad financiera nos pareció poco riguroso".

El pasado lunes comenzó en la Audiencia Nacional el juicio contra la antigua cúpula de Abengoa, entre ellos Benjumea y el ex consejero delegado Manuel Sánchez Ortega, por presunta administración desleal, al haber acordado pagos de 11,4 y 4,5 millones de euros, respectivamente, en concepto de indemnización por su cese anticipado.

Ello, según la Fiscalía, a sabiendas de que la compañía "ya atravesaba una grave crisis".

En esta segunda sesión también ha intervenido el ex consejero delegado de la compañía Manuel Sánchez Ortega, que ha insistido en que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) conocía los detalles de los nuevos contratos de alta dirección suscritos en febrero de 2015, apenas dos meses antes de su marcha y por los que accedió a la indemnización de 4,5 millones objeto de pesquisas.

Asimismo, ha defendido que la contabilidad en aquella época "estaba impecable" y ha negado que Abengoa realizara ajustes en las cuentas de 2014 y 2015 pues "no sufrieron ni una sola variación".