
Robert Habeck, ministro de Economía en funciones de Alemania, en la presentación de las nuevas previsiones macroeconómicas del Gobierno. DPA / Europa Press
Alemania rebaja su previsión de crecimiento por la guerra arancelaria y prevé un estancamiento del PIB en 2025
De confirmarse este dato, el país germano entraría en el periodo más prolongado de debilidad económica del país desde la Segunda Guerra Mundial.
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El Gobierno alemán en funciones ha revisado a la baja sus proyecciones de crecimiento para el país como consecuencia de la guerra comercial desatada por los aranceles anunciados por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. El Ejecutivo prevé ahora que la economía germana se estanque este año, en comparación con su última estimación publicada el pasado mes de enero, que recogía un crecimiento del 0,3%
De confirmarse un crecimiento 'cero' del Producto Interior Bruto (PIB) de Alemania en el actual ejercicio, estaríamos ante el periodo más prolongado de debilidad económica del país desde la Segunda Guerra Mundial, ya que registró una contracción del 0,2% en 2024 y del 0,3% en 2023.
Según recoge Europa Press, el ministro de Economía saliente, Robert Habeck, ha informado este jueves del recorte de la previsión de crecimiento para 2025, que el pasado mes de enero, antes de las elecciones federales, ya rebajó desde el 1,1% previsto en octubre de 2024 hasta ese 0,3%.
Asimismo, a pesar de que las nuevas proyecciones de Berlín siguen contemplando un rebote del crecimiento del PIB en 2026, este será más débil de lo previsto. La previsión publicada este jueves para el próximo año es del 1%, una décima menos en comparación con el 1,1% anticipado el pasado mes de enero y seis menos que el 1,6% previsto el pasado otoño.
"La economía alemana atraviesa momentos difíciles", reconoce el Gobierno del país, que destaca, en concreto, el aumento sustancial de la incertidumbre económica mundial a raíz de los aranceles anunciados y sólo parcialmente suspendidos por Estados Unidos. Algo que ha generado turbulencias en los mercados financieros internacionales y ha empañado las perspectivas de crecimiento global.
Guerra comercial
En este sentido, Berlín considera que la política comercial estadounidense "ha afectado especialmente a la economía alemana", que ya sufre una débil demanda externa y una menor competitividad. No obstante, confía en que la disminución de la incertidumbre política interna y el aumento de los ingresos reales impulsen una recuperación gradual del consumo privado.
En este sentido, el nuevo cuadro macroeconómico contempla que las decisiones de política fiscal del futuro Gobierno federal proporcionarán un impulso positivo, aunque avisa de que únicamente contribuirán de forma notable al crecimiento en los próximos años.
Asimismo, dadas las persistentes perspectivas económicas sombrías, es probable que la recuperación del mercado laboral esta primavera sea débil. En consecuencia, prevé que el empleo disminuya inicialmente en 2025, con un probable aumento también del desempleo. Aunque a medida que avance la recuperación económica, el empleo subirá y el número de desempleados bajará en 2026.
En cuanto a los precios, se prevé que la tasa de inflación descienda del 2,2% el año pasado al 2% este año y al 1,9% en 2026. En este sentido, Berlín considera probable que los efectos de la política comercial estadounidense también moderen la tasa de inflación si China desvía cada vez más sus exportaciones hacia otros países como Alemania.
"La economía alemana se enfrenta de nuevo a grandes desafíos debido a la impredecible política comercial de Estados Unidos", ha advertido Habeck, para quien, dada la estrecha integración de la economía alemana en las cadenas de suministro globales y su alto nivel de apertura al comercio exterior, "el nuevo proteccionismo estadounidense podría tener importantes efectos directos e indirectos en su crecimiento económico".
Ante estas circunstancias, el ministro saliente ha expresado el profundo interés de Alemania en que la Unión Europea y EEUU encuentren una solución al conflicto arancelario en el marco de las negociaciones en curso. Así, recalcó la importancia de apoyar a Bruselas en su clara postura de negociar con confianza con su socio transatlántico mientras se preparan contramedidas efectivas.
"La unidad de la Unión Europea es crucial en este sentido. Solo así podremos prevalecer en este conflicto. Esto significa que ningún país ni ninguna empresa puede abandonar esta solidaridad", ha afirmado.