Los datos recogidos sobre la evolución del PIB constatan esta evolución. Las horas efectivamente trabajadas cayeron un 0,3% intertrimestral entre enero y marzo. Los puestos de trabajo equivalentes a tiempos completo también se redujeron y se recortaron un 0,1%. 

En la comparación interanual, en ambas métricas, se constata la desaceleración. Pese a que las horas efectivamente trabajadas y los puestos de trabajo equivalentes crecen (un 1,3% y un 3,4%, respectivamente) respecto a los primeros tres meses de 2022, lo hacen en un grado menor que durante los últimos trimestres. 

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Paradójicamente, esta evolución de las horas trabajadas y de los puestos de trabajo ha llevado a una mejora de la productividad. Concretamente, en términos intertrimestrales, la productividad por puesto de trabajo equivalente a tiempo completo subió un 0,8% y la productividad por hora trabajada se elevó un 1%. 

Ya la información recogida por la Encuesta de Población Activa (EPA) daba pistas sobre esta evolución. España perdió 140.000 ocupados en el primer trimestre y la tasa de paro se elevó al 12,3% entre enero y marzo. 

Fuerte creación de empleo

Pese a ello, en la información remitida a Bruselas el Gobierno afirma que el mercado laboral recuperará y mejorará su salud en los próximos meses. "La fuerte creación de empleo en España se prolongará en los próximos años".

Concretamente, "el escenario macroeconómico proyecta que se alcanzarán nuevos máximos de ocupación y una reducción de la tasa de paro hasta cifras inferiores al 11%" para 2025.

"Esta dinámica se verá reforzada por un significativo crecimiento de la población activa. El dinamismo del empleo, junto con la recuperación de poder adquisitivo de los salarios, será el principal motor de la evolución del consumo de los hogares", añade.